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Columna
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El ambicioso pero delgado reajuste de Eon

La revisión estratégica de Eon es grande en la ambición, pero lamentablemente pequeña en los detalles. El gigante eléctrico alemán ya había sido reestructurado cuando Johannes Teyssen pasó de jefe de operaciones a presidente ejecutivo en mayo. Teyssen parece que está ganando tiempo ahora para revivir un grupo obstaculizado por las adquisiciones excesivamente caras. Pero mientras haya garantía para los inversores, a través de la promesa de un dividendo mínimo y venta de activos, el reajuste deja sin respuesta preguntas cruciales.

La mayor incertidumbre es en qué mercados, con excepción de Rusia y EE UU, Eon llevará a cabo su objetivo de reducir su dependencia del negocio europeo estancado. Teyssen dice misteriosamente que "hay dos" en la mirilla. A pesar de que la lista de posibles es limitada, todavía no se siente cómodo para nombrarlos.

Lo siguiente es la flexibilidad financiera. Si Eon tiene éxito en la reducción de su deuda neta -de 45.000 millones de euros y casi igual a su capitalización de mercado- a niveles más razonables y determina cuál es su gasto disponible para la diversificación geográfica. Crecer y competir con éxito en nuevos mercados no será barato, y Eon deberá maniobrar para alcanzar el mismo nivel de utilidad de la francesa GDF Suez y la italiana Enel.

Después está la cuestión de qué activos tiene previsto vender para alcanzar su meta de desinversión de 15.000 millones de euros a finales de 2013. Eon, obviamente, no quiere convertirse en un vendedor forzado, cediendo demasiado en precio. Pero la realidad es que hay algunos activos que deben ser recortados. La estricta regulación en el negocio de distribución de electricidad que se forjó en Reino Unido ha sido bloqueada, pero esto podría generar como mucho un 20% del total de ingresos fijados. Eon podría vender también su negocio de red de suministro de gas alemana y obtener alrededor de 3.500 millones de euros con la venta de su participación en la rusa Gazprom. Finalmente, hay 600 millones del plan de eficiencia que, según la empresa, quiere lograr a través de su reorganización. El grupo dice que "está en camino" de alcanzar los 1.500 millones del plan de ahorro de hace más de tres años. Y como las acciones han ganado casi nada desde que Teyssen asumió el cargo, estará encantado de anunciar que su estrategia les ha dado un aumento del 4%. Pero el valor sigue estando muy por debajo de sus 12 meses en alza. Si no hay más claridad, es probable que esto no cambie.

Alexander Smith

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