Comienza el debate sobre los presupuestos alemanes más ambiciosos de la historia
Los debates sobre los presupuestos públicos alemanes para 2010 y 2011 -que deben marcar el comienzo del programa de ahorro más ambicioso de la historia- se abrieron hoy con con un intercambio de reproches entre el gobierno y la oposición en el Bundestag, la cámara baja germana.
El ministro de Finanzas, Wolfgang Schäuble, defendió ante el parlamento el proyecto de ley que recoge parte clave del plan de ajuste con el que Alemania espera ahorrar 80.000 millones de euros en los próximos cuatro años.
El proyecto contempla recortes sociales, un impuesto especial a los billetes de avión a partir de 2011 y un desmantelamiento de los privilegios de que gozan las empresas en lo relativo al impuestos a la energía.
Sobre los recortes sociales, Schäuble dijo que estos son inevitables a la hora de consolidar un presupuesto como el alemán, donde cerca del 50% de los gastos está dedicado al sector social.
Entre los recortes, el más significativo es la eliminación del pago de cotizaciones a la caja de pensiones para los receptores de ayuda social -el llamado subsidio de desempleo II- que deberá ahorrarle al fisco cerca de 7.000 millones de euros en los próximos cuatro años.
Schäuble parte de la base de que este año el crecimiento económico de Alemania estará por encima del 3 por ciento pero advirtió que esto no se repetirá en 2011.
La oposición acusa al gobierno de poner en peligro el equilibrio social con su plan de recortes y además ha encontrado un flanco de ataque en el acuerdo entre el ejecutivo y los consorcios energéticos sobre la energía nuclear que, según todos los sondeos, es rechazado mayoritariamente por la población.