Familiares, los nuevos deportivos polivalentes
Amenazados por el auge de los SUV y los monovolúmenes, las rancheras se reinventan
Los coches popularmente conocidos como familiares o rancheras llevan muchos años enfrentándose a un futuro incierto. En los años 80 se vieron amenazados por los monovolúmenes, cuyos primeros representantes fue el Chrysler Voyager y el Renault Espace, ambos de 1984. A ese envite los familiares sobrevivieron, y a finales de los 90 llegaron los SUV (Sport Utility Vehicle) o crossovers. Son coches con estética todoterreno y tracción total, pero destinados a circular fundamentalmente por asfalto.
En EE UU las ventas de SUV grandes han bajado en los últimos cuatro años, pero han descendido aún más las de familiares. Los clientes están comprando SUV y dejando a un lado las rancheras. Tanto es así que los responsables comerciales de BMW han decidido no vender en el mercado estadounidense la versión Touring del nuevo Serie 5. Si en 2005 comercializaron 2.351 unidades del Touring, el año pasado sólo alcanzaron 878. Volvo, una marca que tradicionalmente ha vendido muchos familiares en EE UU, también ha visto descender la matriculaciones de su V70 en casi un 90% desde 2001, cuando vendieron 14.423 unidades. Además, los recientes SUV híbridos, como el superventas Lexus RX 450h o los nuevos Porsche Cayenne y Volkswagen Touareg, permiten atenuar el principal problema de los SUV: su elevado consumo.
En Europa la situación no es tan mala para los familiares. Aquí el combustible es mucho más caro y predominan las berlinas diesel, de modo que los SUV suponen un gasto por kilómetro claramente superior. Además los familiares se perciben cada vez más como coches con un estilo deportivo, reflejo de un estilo de vida dinámico. Del mismo modo que la mayoría de los clientes no compra un SUV por necesidad sino simplemente porque le gusta, muchos compradores de familiares también los están adquiriendo por imagen, porque las berlinas les parecen demasiado conservadoras. Según los principales fabricantes, los clientes que optan por este tipo de carrocerías en perjuicio de las berlinas tradicionales, suelen ser más jóvenes y con mayor nivel económico y cultural.
El Bentley Touring Flying Star cuesta 590.000 euros
Por ello los familiares han ido adquiriendo un perfil cada vez más premium y alto de gama. Ya no ocurre como en los años 70, cuando los españoles compraban un Seat 124 o un Renault 12 ranchera para acomodar a su numerosa prole. En el siglo XXI la capacidad no es la prioridad absoluta, sino que lo más importante es el diseño. Además ya no se usa oficialmente la palabra "familiar". Cada marca tiene un nombre comercial para sus rancheras, lo que en ocasiones despista a los clientes poco expertos en estas cuestiones. Los Audi se llaman Avant, los BMW Touring, los Volkswagen Variant o los Renault Grand Tour. Otros competidores como el Toyota Avensis Cross Sport, el Ford Mondeo Sportbreak o el Opel Insignia Sports Tourer, muestran que el término "Sport" es un elemento esencial de las recientes estrategia de marketing.
En España la demanda de familiares ha sido tradicionalmente inferior a la que se registra en Alemania, Francia o Italia. Aun así siguen teniendo un mercado estable. Un buen ejemplo es el Volkswagen Passat, líder de su segmento, en el que un 25% de las ventas son modelos familiares. Algo muy similar ocurre con el Audi Audi A4 Avant, que también disfruta de una elevada demanda en nuestro país. El año pasado la importadora vendió un total de 11.924 unidades, y de ellas 2.839 (23%) eran Avant. En el segmento superior, el del Audi A6, el porcentaje de familiares se reduce. De las 2.850 unidades entregadas, sólo 439 (15%) fueron Avant.
Mercedes ha sido valiente en los últimos años al arriesgar con el lanzamiento de nuevos conceptos de vehículo. Su entrada en el mercado de los monovolúmenes medios con el Clase B ha sido un éxito, pero no tanto la Clase R. Con este lujoso y amplio automóvil fabricado en EE UU, mezcla de monovolumen y 4x4, fundieron lo mejor de ambos mundos, pero la acogida ha sido fría, quizá por su diseño. Se lanzó en 2006, y ahora llega una nueva gama con un estilo más atractivo. Pero lo último de Mercedes es el prototipo Shooting Break Concept, recién presentado el Auto China 2010. La denominación Shotting Break ya fue utilizado en el pasado por los británicos, y los más conocidos son unos Aston Martin DB5 con la carrocería especial, modificados para cazar. Dice la leyenda que una mañana de septiembre de 1965, el dueño de Aston David Brown convocó una reunión en la fábrica y se presentó con su perro labrador. Colocó a su mascota encima de la mesa y dijo: "construirme algo donde él se pueda sentar".
El nuevo Mercedes viene a ser una versión familiar del futuro CLS. El CLS actual se lanzó en 2004 y compartía plataforma con la Clase E. Su estilo afilado, como el de un cupé de cuatro puertas, se considera precursor de otros modelos que han llegado después, como el Porsche Panamera o el Aston Martin Rapide. Gorden Wagener, jefe de diseño de Mercedes, asegura que el Shooting Break Concept integra las claves del diseño futuro de su marca.
Actualmente lo más parecido a un Aston Martin Shooting Brake que se puede comprar es el nuevo Bentley Continental Flying Star desarrollado por Carrozzeria Touring Superleggera, de Milán. Se trata de una transformación realizada sobre la base del cupé Continental, mediante la cual queda convertido es una especie de ranchera de dos puertas. El Flying Star está desarrollado con la colaboración de Bentley, lo que garantiza su calidad extrema. Es una rareza y un capricho para millonarios sibaritas, y su precio alcanza los 590.000 euros.
Otro familiar muy especial es el CTS-V Sport Wagon, que acaba de ser presentado por Cadillac. La marca norteamericana hace tiempo que lucha por tener una imagen moderna y dinámica, y la gama V es el equivalente a los AMG de Mercedes o a los M de BMW. La firma de lujo de General Motors aplica en este coche toda su experiencia en el mundo de la competición, así como la tecnología utilizada en los Corvette.
El resultado es un superdeportivo con un motor V8 con compresor, 564 CV y tracción trasera. Y no sirve sólo para correr en rectas, porque su chasis está desarrollado para lograr una gran eficacia en zonas viradas. Empezará a venderse a finales de año y sus rivales serán fieras como el Audi RS6 Avant (580 CV), el Mercedes Clase E 63 AMG Estate (525 CV) o el futuro BMW M5 Touring. Por si ha alguien tiene problemas de espacio, la capacidad del maletero es de 720 litros.
Otras historias
Los RS Avant de Audi. Saga la referencia en su claseAudi fue pionera en lanzar automóviles familiares deportivos. Todo comenzó con el RS2 de 1993. Montaba el motor Audi de 5 cilindros con turbo y rendía 315 CV, una cifra más que notable para la época. Además tenía tracción total y sólo se vendía con la carrocería familiar tomada del Audi 80 Avant. La producción del RS2 corrió a cargo de Porsche, y los intermitentes delanteros, las llantas y los frenos eran los mismos que los del 911. El rey Juan Carlos disfrutó de uno de ellos durante años. Después llegó el primer RS4 lanzado en 2000, con motor 2.7 V6 biturbo de 380 CV y disponible únicamente con carrocería familiar. La siguiente generación del RS4 pasó a emplear un motor V8 atmosférico de 420 CV y se podía elegir también con carrocería berlina. Los familiares deportivos basados en el A6 han seguido una evolución similar, y actualmente el modelo más potente de Audi no es el biplaza R8 sino el es el RS6 V10 biturbo de 580 CV, con carrocería berlina o Avant.Brunei los coches del sultán. Caprichos de una familia real Todo un Ferrari pero con cinco puertas. El 456 Venice de 1996 forma parte de un lote de modelos 456 que salieron de la factoría de Maranello en su configuración normal y que posteriormente fueron transformados en cabriolets, berlinas de cuatro puertas y familiares en las instalaciones Pininfarina en Turín. Los denominados 456 Venice fueron un encargo que tuvo como impulsores a miembros de la familia real de Brunei, personajes que al parecer no encontraban en el mercado modelos que se adaptaran a sus necesidades. En el Venice familiar (parece ser que se fabricaron 8 unidades) la carrocería fue alargada 20 mm y se incorporaron largueros a la estructura para permitir el alargamiento y la instalación de las puertas traseras. En la colección de 5.000 coches de la familia real hay también otros Ferrari de encargo con carrocerías exclusivas, como versiones de calle del prototipo Mythos o el FX, basado en F512M. Otros de sus caprichos disparatados son los Bentley familiares y con tracción total.Evolución ascenso y caída de los station wagons. En EE UU ya no quieren familiaresEn el mundo del automóvil siempre es arriesgado decir quien fue el primero en algo, pero lo que entendemos por coche familiar derivado de una berlina, comenzó a venderse masivamente en EE UU en los años 50. Se comercializaron con dos o cuatro puertas, e incluso sin pilares intermedios entre las ventanillas, como los cupés. En los años sesenta algunos grandes modelos de Ford ofrecían hasta nueve plazas, incluyendo las más retrasadas con los asientos enfrentados. Empleaban grandes motores V8 en una época en que la gasolina era casi regalada. Con los monovolúmenes y los SUV llegó su decadencia, y pronto fueron conocidos despectivamente como "el coche de la abuela". En 1996 los familiares vivieron su peor momento, cuando los dos modelos más conocidos de este tipo, el Chevrolet Caprice y el Buick Roadmaster dejaron de producirse por la escasa demanda. En 2005 el Dodge Magnum (gemelo del Chrysler 300C) supuso la vuelta de los familiares al mercado, aunque con poco éxito. Los modelos europeos también han visto sus ventas muy reducidas.