EE UU y China anuncian medidas contra el cambio climático y la ONU pide más acción
Se acabó el tiempo de reiterar declaraciones, hace falta acción real", exigió ayer en la inauguración de la XV Cumbre sobre el Cambio Climático de Copenhague el responsable de este área en la ONU, Yvo de Boer. æpermil;ste recordó a los representantes de los 192 países asistentes que el encuentro sólo será un éxito si se acuerdan "acciones significativas e inmediatas que entren en vigor al día siguiente de su clausura". Para esa fecha, el 18 de diciembre, se espera la asistencia de los principales líderes mundiales -por primera vez desde la cumbre de 1990-, pero parece claro que faltará el Tratado que ha de sustituir al de Kioto en 2013. Más factible parece que se dé un principio de acuerdo que marque las líneas del documento final, que debería sellarse en México en 2010.
El acuerdo, mantiene la ONU, deberá marcar tres directrices: la adaptación tecnológica al nuevo modelo biosostenible, la financiación a largo plazo de dicha reforma y un fuerte compromiso para reducir las emisiones de CO2. La exigencia en este sentido es que para 2020 los países desarrollados reduzcan entre un 25% y un 40% sus niveles de gases de efecto invernadero respecto a 1990. Las potencias emergentes podrán aumentarlos, pero entre un 15% y un 30% menos de lo previsto inicialmente.
Pese a las advertencias y las expectativas, de los principales países contaminantes más que acciones concretas siguen surgiendo anuncios a largo plazo. La Administración estadounidense ya avanzó que reducirá un 17% sus emisiones, pero respecto a 2005, lo que mina la efectividad del plan de la ONU. Hubo ayer, sin embargo, una prometedora novedad. La Agencia de Protección Medioambiental (EPA) de EE UU concluyó un estudio vinculante sobre el peligro del dióxido de carbono. æpermil;ste supone el primer gran paso de Barack Obama en su campaña medioambiental, ya que el informe obliga a las empresas a reducir sus emisiones, independientemente de que se apruebe la legislación pendiente al respecto que, por el momento, permanece bloqueada en el Senado. China, principal emisor de gases contaminantes, avanzó que para 2050, un tercio de su energía será renovable, lo que significaría un gran cambio, ya que ahora el 70% procede del carbón.
Respeto a los intereses de la OPEP
Mientras el mundo se reúne en Copenhague para intentar decidir cuál será la alternativa energética del futuro, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) reclamó ayer que las naciones desarrolladas les presten ayuda financiera, si quieren su colaboración en la lucha contra el calentamiento global. "Los combustibles fósiles seguirán siendo la principal fuente de energía en el futuro predecible", resaltó el secretario general de la OPEP, Abdalá Salem El-Badri, por lo que reclamó que se tengan en cuenta sus intereses a largo plazo en las decisiones que tome la Cumbre del Cambio Climático.