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Columna
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La integridad de News Corp, en entredicho

News Corporation vive de conseguir noticias. Ahora News Corp es noticia. El grupo de Rupert Murdoch ha sido acusado de haber pagado un millón de libras por acuerdos para evitar juicios que podrían haber expuesto prácticas ilegales de algunos de sus reporteros en sus investigaciones. Murdoch ha negado rotundamente estar al tanto de los pagos, sacados a la luz por el periódico inglés Guardian. Pero si sus afirmaciones son ciertas y Murdoch no estaba al tanto del tema, ¿entonces quién manda realmente en News Corp?

Los periódicos The Sun, News of the World y Times están acusados de haber pactado tres acuerdos extrajudiciales. æpermil;stos tenían el efecto de controlar la prueba de que los periodistas piratearon teléfonos y grabaciones privadas con la ayuda de investigadores privados. Los objetivos incluían famosos, ministros y políticos de los tres mayores partidos británicos.

News Internacional, grupo de medios filial de News Corp, tiene aún que desmentir las acusaciones de Guardian. Pero si la historia es verdad, la falta de conocimiento sugiere una inquietante falta de control sobre asuntos tan importantes. Los controles de News Internacional deberían haber prevenido que tales sumas fueran pagadas sin aprobación de un alto ejecutivo. En verdad, Murdoch no puede estar disponible para autorizar cada cheque de su empresa. Pero parece extraño que tan seria partida no hubiera sido elevada a su oficina. Si Murdoch no lo sabía, ¿quién fue la persona responsable al tanto?

La respuesta del diario británico a la acusación de Guardian ha sido también sorprendentemente tibia. Ha sido una copia a las seguidas normalmente cuando un periódico hace serias acusaciones a un famoso. Quizá la desgana de los rivales por incidir en la historia es prueba de que no son sólo los políticos, sino también los periodistas, los que tienen miedo de disgustar a Murdoch. Pero el temor de desagradar al magnate de los medios de comunicación no hará desaparecer esta historia a toda prisa

Por supuesto, el Guardian puede haber recogido hechos erróneos. Pero en cualquier caso, James Murdoch, presidente ejecutivo de News Internacional, necesita actuar rápido. Debe ahora como mínimo llevar a cabo una investigación interna para defender la integridad de sus periódicos.

Por Una Galani

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