Europa del Este, ¿refugio o trampa?
Un comunicado oficial colgado en la web del Ministerio de Comercio de China recomienda a los ciudadanos de ese país que no elijan Polonia, Rumanía, Ucrania u otros países del Centro y Este de Europa si están dispuestos a emigrar. La causa esgrimida es la crisis económica y el parón en la construcción.
Si la Europa en vías de desarrollo ha dejado de ser un refugio para obreros de bajo coste, qué decir de las empresas que han exprimido el miniboom del ladrillo.
El consejero delegado de la constructora polaca Budimex, Marek Michalowski, ha reconocido en medios locales que 'el sector residencial está hundiéndose por completo'. Esta filial de Ferrovial, a la que el grupo español debe el 19% de sus ingresos en el negocio de la construcción, se conforma con cerrar 2009 con un crecimiento plano tras declarar hace escasas semanas unas ventas de 982 millones, un 18% por encima del resultado de 2007.
La construcción atisba un frenazo en Polonia o Rumanía, tierra de promisión hasta 2008
El colchón que amortiguará la caída residencial en países como Polonia son los fondos de la UE para invertir en infraestructuras, aunque el mensaje de Michalowski suena a voz de alarma y añade que ni la obra civil podrá atenuar el golpe.
Afortunadamente para Ferrovial, tres de sus filiales (Cintra, Agromán y Budimex) se acaban de apuntar un contrato valorado en 2.100 millones para operar y construir una autopista de peaje polaca. Un hito que triplica la cartera de proyectos de Budimex, que presentaba un preocupante adelgazamiento del 6,4%, hasta los 856 millones en 2008.
FCC también viajó al Este ante la creciente presión de la competencia y la madurez del mercado español.
El grupo que controla Esther Koplowitz debe un 92% de sus ventas internacionales a países como Austria, Rumanía, Bulgaria, República Checa, Polonia y Croacia, donde se ha hecho fuerte a través de la filial Alpine. Un pulmón que aún no ha dado síntomas de agotamiento, habiendo elevado su cifra de negocio un 35% en 2008, hasta los 3.506 millones de euros, y tras incrementar el Ebitda un 42%.
ACS es la tercera con fuertes intereses europeos, como primera accionista del gigante germano Hochtief. La entidad española participa en sus beneficios al consolidar por puesta en equivalencia una participación del 29,98%. La aportación de la germana a las ganancias de ACS ha sido en 2008 de 44,2 millones, lo que implica un alza del 43,6%.
Con menos volumen de negocio, pero con una apuesta decidida figuran constructoras como Comsa o Aldesa. Otras como Joca o Copasa dan sus primeros pasos.
Seguro que tienen en cuenta que la construcción destaca entre los sectores que peor pagan en Croacia, República Checa, Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumanía, Eslovenia y Eslovaquia.
Y también conocerán los datos de producción del sector en enero. Según Eurostat, Eslovenia, que crece el 22% respecto a diciembre de 2008, es la excepción a los descensos generalizados de Hungría (-13,9%), Alemania (-7,8%) y Rumanía (-6,4%). Habrá que ver si esta región europea soporta la crisis y no termina siendo trampa en lugar de refugio.