_
_
_
_
Acuerdo

Apoyo mayoritario al gravamen 'antibonus' en EE UU

El escándalo de los 165 millones de dólares (unos 120 millones de euros) en bonus al personal de AIG que creó el agujero por el que la compañía se viene abajo ha hecho reaccionar a la velocidad de la luz al Congreso de EE UU. La Cámara de Representantes aprobó ayer, con comodidad, gravar con un tipo impositivo del 90% estas primas cuando se concedan en firmas que hayan recibido a partir de 5.000 millones de dólares de dinero público, como es el caso de AIG, y a personas cuyos ingresos familiares superenlos 250.000 dólares anuales.

La iniciativa legislativa partió de la mayoría demócrata apenas horas después de que el miércoles, el consejero delegado de AIG, Edward Liddy, dijera que no había resquicio legal para rescindir unos contratos que garantizaban estas primas millonarias. El escándalo generado por estas compensaciones en una institución que ha recibido casi 200.000 millones de dinero público ha sido definitiva para que la iniciativa haya contado con el apoyo mayoritario de la cámara (328 votos a favor y 93 en contra).

Inicialmente, los republicanos estaban en contra de esta medida que trascenderá AIG, pero al final, 85 de ellos votaron a favor. El líder de la minoría republicana, John Boehner, calificó la propuesta de 'circo político' con el que distraer la atención del verdadero problema que es el hecho de que el Gobierno no bloqueara antes la concesión de los bonus de AIG.

Aunque la Fed conocía de la existencia de estas primas, el secretario del Tesoro no lo supo hasta hace dos semanas. Boehner propuso que en vez del gravamen se pusiera en marcha un proceso legislativo por el que se obligara a devolver los bonus. El fiscal general, Eric Holder, explora vías para tratar de recuperar el dinero, aunque según el presidente Barack Obama las opciones legales son susceptibles de ser tumbadas por los tribunales porque los contratos están muy cerrados.

La iniciativa de la Cámara Baja aún debe ser refrendada por el Senado, que debatirá sobre otro proyecto ligeramente distinto la semana que viene. Antes de convertirse en ley con la firma de Obama, deben conciliarse ambos textos. Por eso, la viabilidad de este gravamen es aún poco clara.

Veto y supremo

Cuando aún no se había aprobado por la Cámara el gravamen sobre los bonus, ya se oyeron peticiones por parte de republicanos para que Obama vete la iniciativa. El senador Judd Gregg cree que el Supremo juzgará el impuesto inconstitucional, pues penaliza a individuos.

Archivado En

_
_