El Congreso de EE UU reprende a los ejecutivos de Wall Street
Los ejecutivos Wall Street fueron reclamados por el Congreso de Estados Unidos, donde Demócratas y Republicanos los reprendieron porque los 176.000 millones de dólares que recibieron sus bancos de parte del Gobierno no causaron un impacto en la economía real.
Los legisladores aprovecharon la oportunidad de una audiencia de un comité legislativo sobre el complicado programa de rescate para "comerse" a los presidentes ejecutivos de ocho bancos y descargar sobre ellos la creciente furia popular por la crisis económica.
"Quiero saber dónde se ha ido el dinero," afirmó el diputado demócrata Paul Kanjorski. Y dijo a los ejecutivos que si los bancos no usaron el dinero, "por favor, encuentren una forma de recuperar el dinero antes de dejar la ciudad". La audiencia llega un día después que el secretario del Tesoro, Timothy Geithner, no logró convencer al mercado con un nuevo plan de rescate bancario de hasta 2 billones de dólares.
El diputado demócrata Barney Frank, presidente del Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, marcó el tono de la audiencia al decirle a los ejecutivos que tenían que entender el enojo y la frustración de la población y cooperar con los legisladores.
Gresham Barrett, diputado republicano, indicó: "Mis muchachos simplemente no han visto evidencias de que el dinero que se les dio esté funcionando o mejorando sus vidas".
Randy Neugebauer, un Republicano de Texas, se refirió a los banqueros como "ERCs" o entidades respaldadas por los contribuyentes. "Creo que podemos considerar que esto es una reunión de accionistas", comentó.
Los banqueros trataron de mostrarse compungidos y de garantizar a los legisladores que los miles de millones de dólares del pueblo habían sido usados para elevar los préstamos y no para pagar a ejecutivos, a grupos de presión ni a los accionistas.
"Con sudor nos gamos la reputación de ser ahorrativos, no ostentosos", sostuvo Ken Lewis, presidente ejecutivo de Bank of America.
"Los contribuyentes han invertido en nuestras compañías y se merecen saber qué retornos están logrando sobre sus inversiones y cuándo serán pagados", añadió.
Hacia el final, Lewis dijo que él y otros gerentes bancarios no recibieron bonos en el 2008, mientras que los incentivos de ejecutivos de menor rango fueron recortados, en promedio, en un 80%.
Responsabilidad
Cada uno de los presidentes ejecutivos leyeron declaraciones argumentando que sus entidades usaron el dinero responsablemente.
Afirmaron que han incrementado los préstamos desde que comenzó el rescate y que encaminan reformas para el debilitado sistema financiero estadounidense. Fuera del edificio Rayburn, donde tuvo lugar la audiencia, una docena de protestantes se burlaban de Lewis, de Bank of America, con cánticos. "Hey, Ken Lewis siente nuestro sufrimiento", gritaban.
Jamie Dimon, jefe de JPMorgan Chase & Co, dijo que apoya una propuesta para crear un regulador de riesgos sistémicos para ayudar a supervisar los mercados estadounidenses. "Esto nos permitirá comenzar a encargarnos de algunas de las debilidades subyacentes en nuestro sistema y cerrar las brechas de regulación que contribuyeron a la situación actual", aseguró.
"Estamos listos para trabajar con ustedes en la serie de cuestiones que afrontan el sector de los servicios financieros y nuestra economía", añadió. Estados Unidos lucha contra la peor crisis financiera en generaciones, provocada en su mayoría por la explosión de la burbuja crediticia e inmobiliaria inflada por las instituciones financieras.
Esta audiencia fue la primera oportunidad en la que muchos presidente ejecutivos de bancos pudieron sentir la ira de los políticos de Washington desde que estalló la crisis. "Es abundantemente claro que estamos en medio de un enojo público general hacia nuestra industria", reconoció Lloyd Blankfein, presidente ejecutivo de Goldman Sachs.
Además de Blankfein, Lewis y Dimon, también testificaron Vikram Pandit de Citigroup Inc, John Mack de Morgan Stanley, Robert Kelly de Bank of New York Mellon Corp, Ronald Logue de State Street Corp y John Stumpf de Wells Fargo & Co.
"El pueblo americano tiene razón en pretender que usemos (el rescate) en forma responsable, veloz y transparente", declaró Pandit durante la audiencia.