El superávit comercial alemán crece un 17% pese al alza del euro
El superávit comercial alemán creció un 16,8% hasta noviembre y alcanzó un máximo histórico (185.000 millones de euros), tras aumentar sus intercambios comerciales con la zona euro, que ya absorbe el 42,8% de lo que vende.
Tras ser desbancada en agosto por China del primer puesto de la clasificación de los países que más exportan en el mundo, Alemania ha tenido que enfrentarse durante este año a otro obstáculo: la fuerte apreciación del euro frente al dólar. Un euro se cambiaba ayer a 1,471 dólares, lo que supone que el billete verde se ha depreciado un 13% en doce meses. La permanencia de un euro caro ha lastrado la competitividad de las empresas exportadoras europeas, ya que sus productos se encarecen al ser comprados en la divisa europea frente a otros competidores que venden en dólares.
Pero ni la pérdida del primer puesto en la clasificación ni la apreciación del euro parecen haber hecho mella a la locomotora europea, que sigue creciendo con fuerza. De enero a noviembre, el saldo de la balanza comercial alemana (diferencia entre exportaciones e importaciones) se ha situado en máximos históricos, al alcanzar los 185.000 millones de euros, lo que supone un alza del 16,8%, el mayor en cuatro años.
Este récord se ha alcanzado gracias a la aceleración de las exportaciones, que se han situado en 895.000 millones de euros (más que en todo 2006), con un crecimiento del 9,3%. En su consecución ha tenido mucho que ver la progresiva reorientación de las ventas alemanas hacia sus principales socios de la zona euro, que absorben el 42,8% de las exportaciones, y a los países de la última ampliación de la UE, con un 21,9%.
De esta manera, Alemania destinó en 2007 el 64,7% de sus exportaciones a la Unión Europea, que ha ido ganando peso (más de dos puntos y medio respecto a 2006, en el que el porcentaje era del 62,1%) en detrimento de Estados Unidos, el segundo mayor importador alemán.
En 2006, Alemania ya vendió a EE UU bienes y servicios por valor de 77.991 millones de euros, lo que representó un 8,7% del total. Los últimos datos de 2007, correspondientes al primer trimestre, apuntan a que las exportaciones a EE UU cayeron un 4,9% y se situaron en 18.400 millones.
Esta cifra representa el 7,7% del total de las ventas y supone una rebaja de un punto en la cuota de mercado de EE UU, que se ha trasladado a la Unión Europea, en especial a las naciones que no están integradas en la zona euro. En los cuatro primeros meses de 2007, las ventas a esos países ya superaron las realizadas a EE UU en el mismo periodo, al llegar a 25.700 millones. Otro dato que apunta en esa dirección es el crecimiento de Rusia, el duodécimo mayor importador de Alemania, cuyas compras han crecido un 33% en el primer semestre de 2007.