La huelga de los funcionarios contra las horas 40 horas semanales se extiende por Alemania
La huelga que los funcionarios alemanes declararon hace ocho días contra la extensión del horario laboral de 38,5 horas a 40 horas semanales y que sólo fue secundada por dos lander (regiones), se ha extendido hoy a otros 16 estados. Se trata de la primera huelga del sector público en 14 años y comienza a poner nervioso al Ejecutivo de Angela Merkel.
La huega comenzó en los servicios comunales de Bade-Wurtemberg, impulsada por el sindicato más importante de Alemania, ver.di, que denunció los planes del Gobierno de ampliar la jornada laboral. El Sarre se unió a los dos días.
Los paros están afectando al servicio de los hospitales públicos, de recogida de basuras y de guardería. Sin embargo, los trabajadores no se han acogido a la huelga de forma simultánea, lo que está evitando un colapso de estos servicios.
Desde el principio, los impulsores anunciaron la movilización como la más dura desde la "gran huelga" de 1992, que paralizó el país durante doce días antes de lograr sus exigencias salariales.
El secretario general de ver.di, Frank Bsirske, criticó que la ampliación de la jornada laboral en 1,5 horas semanales supone que los funcionarios tendrán que trabajar dos semanas más al año, y servirá para recortar el número de trabajadores públicos en Alemania.