Telefónica eleva la prima de su macroemisión de bonos
La relación de Telefónica con el mundo financiero no pasa por su mejor momento y un ejemplo de ello han sido las reticencias de los inversores hacia las emisiones millonarias de bonos destinadas a refinanciar la compra de O2. La operadora se ha visto forzada a mejorar las condiciones para convencer al mercado.
Telefónica ha logrado su objetivo. En su bolsillo está ya el capital necesario para refinanciar parte del macro préstamo de la opa de O2. Lo ha conseguido con cuatro emisiones de bonos, dos en euros y otras tantas en libras, que han sido ampliamente sobresuscritas.
Pero la operadora ha tenido que hacer alguna concesión por el camino para conseguir los fondos. Y es que las dudas que despierta la agresiva estrategia de compras de la compañía, el aumento de la deuda por la adquisición de O2 y las rebajas de rating han forzado a Telefónica a elevar la prima ofrecida para convencer a los inversores.
Lo hizo ayer por la mañana y por la tarde ya tenía el dinero en sus manos. En total son 5.840 millones de euros recaudados, en lo que supone la mayor emisión de bonos de los últimos tres años.
Telefónica ha tenido que elevar la prima o la rentabilidad que va a pagar a los bonistas en las cuatro emisiones que ha puesto en el mercado. La que más ha subido es la colocación a diez años en euros, que ha ganado nueve puntos básicos. Los dos tramos en libras son los que menos han variado, al aumentar dos puntos básicos.
Al final, la rentabilidad de la emisión en euros a cinco años ha quedado en 60 puntos básicos por encima del swap de interés, mientras que el plazo de diez años se ha ido a una prima del 0,98%. Las emisiones en libras se han colocado a 130 y 142 puntos básicos, respectivamente, en los vencimientos a 12 y 20 años.
'Todo tiene un precio', aseguró a Bloomberg la gestora de inversiones Caroline Piers. 'A los nuevos niveles, los inversores están ahora siendo compensados' por los riesgos, sentenció.
Así fue. Los inversores han pedido más prima a Telefónica para compensar su estrategia de adquisiciones y el menor rating, pero han comprado en cuanto la operadora ha respondido a su petición. Tanto el importe de las emisiones en libras -de 1.250 millones- como el tramo en euros -de 4.000 millones- han sido más de 2,3 veces sobresuscritos.
El peso de O2 y de las rebajas de 'ratings'
La emisión de bonos a cinco años de ayer tiene el mismo precio que una realizada bajo la presidencia de Juan Villalonga en 2000. Sin embargo, comprada con una colocación a diez años fechada en 2003, la prima se ha encarecido cinco puntos básicos. Está claro que a Telefónica le cuesta más la financiación que en tiempos que fueron mejores, pero la sensación que se respira en la operadora es que las colocaciones se han hecho a muy buen precio. No en vano, la compra de O2 duplicará la deuda de Telefónica, mientras que su rating está a los niveles más bajos que se recuerdan. Con esas premisas, los financieros del ex monopolio están satisfechos con la operación.Lo están más aún al fijarse en sus homólogas europeas. Telecom Italia, por ejemplo, tiene un bono a cinco años cotizando al 4,48%, cuando el de Telefónica no superará el 3,80%.