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CincoSentidos

Los móviles también se van de vacaciones

El roaming, el servicio 'itinerante' por el que las telefónicas de cada país firman acuerdos con las de otros para dar cobertura en el extranjero a sus clientes, está proporcionando más de un quebradero de cabeza a las compañías. La Comisión Europea ha acusado a varias de ellas de poner precios abusivos y poco transparentes, y Vodafone ha sido denunciada por una asociación de consumidores por activar el servicio sin avisar.

Al margen de los problemas de las operadoras, para el viajero lo importante es conocer cómo funciona el servicio en cada caso y qué hacer para evitar posteriores disgustos en la factura. Antes de salir debe llamar a atención al cliente para comprobar que el roaming está activado y consultar los operadores con los que su compañía tiene acuerdos en su(s) lugar(es) de destino, para elegir el que sale más barato, si es que lo hay: las empresas tienden a establecer tarifas fijas según las zonas, al margen de sus socios concretos en cada país. La cobertura de cada red de roaming puede consultarse en www.gsmworld.com.

También debe comprobar en qué banda emite la telefonía móvil del destino en cuestión. Países como EE UU, Argentina, Chile y Canadá usan redes GSM 850 o 1900, incompatibles con los terminales españoles, válidos para 900 y 1800. Algunas compañías ofrecen el alquiler o la compra de estos terminales, en España o en el extranjero.

Otra previsión importante es si en el lugar de descanso funciona la tecnología Camel, que permite a los usuarios de móvil llamar como si se encontraran en su país de origen, ahorrándose los engorrosos prefijos. Suele estar disponible para los clientes de tarjeta, y a veces para los de pospago.

Una vez fuera de España, conviene recordar que el que llama, que no tiene por qué saber donde se encuentra el receptor, paga sólo el tramo nacional. El resto va a cuenta del viajero. No está de más, por tanto, echar un vistazo al número antes de contestar una llamada. Movistar y Vodafone ofrecen servicios para que el que llame pague toda la conversación, con una cuota de conexión para el receptor. El buzón de voz no es gratis en el extranjero: escucharlo sale a precio de una llamada internacional. Desactivarlo es otra opción; si quieren contactar, lo conseguirán, tarde o temprano.

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