Bruselas propone suprimir el impuesto de matriculación
La Comisión Europea aprobó ayer un proyecto de directiva para armonizar la fiscalidad del automóvil en la Unión Europea. Bruselas quiere suprimir el impuesto de matriculación antes de 2016 y ligar el 50% de las tasas del vehículo a su impacto medioambiental. La propuesta no afecta al IVA ni a los impuestos del combustible.
Después de casi tres años rumiando la propuesta, el organismo comunitario se mostró ayer confiado en contar con los apoyos necesarios para llevarla adelante. Como todas las directivas relacionadas con fiscalidad, necesita ser aprobada por unanimidad de los Veinticinco Estados de la Unión.
El proyecto de ley comunitaria aspira 'a establecer una estructura europea de los impuestos aplicables a los turismo', según explicó ayer la Comisión. La primera medida para conseguirlo es 'la eliminación del impuesto de matriculación con un período transitorio de entre cinco y 10 años'.
La industria automovilística critica desde hace años ese impuesto. Y atribuye a su existencia la disparidad de los precios de venta del automóvil que periódicamente critica la Comisión Europea.
Bruselas se basó en gran parte en esas persistentes divergencias de precios para justificar la reciente reforma del sistema de distribución de la industria (restringiendo la posibilidad de recurrir a concesionarios exclusivos de una marca).
Pero ahora reconoce que 'las enormes diferencias entre los sistemas fiscales de matriculación merman las posibilidades del sector para beneficiarse de las ventajas de operar en un mercado interior'.
'La industria', dijo ayer la Comisión para justificar la directiva sobre armonización fiscal, 'a menudo se ve obligada a fabricar modelos con especificaciones diferentes para reducir el precio antes de impuestos, sobre todo, cuando son vehículos destinados a países con una fiscalidad muy elevada'.
La CE quiere corregir también la doble imposición que soportan los ciudadanos que adquieren un vehículo en un país y, por cambio de residencia, lo matriculan de nuevo en otro. El proyecto de directiva prevé que, en esos casos, el Estado donde se matriculó el vehículo por primera vez esté obligado a reembolsar una parte del impuesto. La situación quedaría definitivamente resuelta, según la propuesta de Bruselas, con la supresión del impuesto de matriculación a partir de 2016.
España, entre los países que gravan la compra
El impuesto de matriculación existe en 16 países de la Unión (incluida España) y puede oscilar entre los más de 15.000 euros de Dinamarca y los casi 300 euros de Italia. Su supresión puede suponer una merma importante en los ingresos del Estado.Los impuestos del automóvil (incluido el de circulación y los del combustible) suponen entre el 4,5% y el 10,2% de la recaudación fiscal de los países de la UE. Bruselas sugiere que se mantenga esa presión fiscal compensando la supresión del impuesto de matriculación con un aumento del resto de gravámenes.La Comisión propone, en concreto, que cada Estado miembro vincule antes de 2008 el 25% de sus ingresos fiscales procedentes del automóvil al nivel de contaminación de cada vehículo. A partir de 2010, esa relación debería alcanzar al 50% de los ingresos.