Zapatero afirma que mantendrá la deducción por vivienda y planes de pensiones
El nuevo IRPF contará con una deducción por vivienda 'esencialmente' como ahora, según José Luis Rodríguez Zapatero. El presidente del Gobierno confirmó que se reducirá el número de tramos y se mejorará el trato a las rentas del trabajo. Habrá un 'descenso' en el impuesto de sociedades para adaptarse a los cambios del IRPF.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, despejó ayer una duda que lleva varios meses causando quebraderos de cabeza a millones de contribuyentes del impuesto sobre la renta. En la próxima reforma del IRPF, que ahora está preparando el Ministerio de Hacienda para el próximo año, se mantendrá la deducción fiscal por compra de vivienda. 'Habrá una reordenación de las deducciones en el impuesto que no afectarán esencialmente a la de vivienda, (deducción) que mantendremos', avanzó el presidente del Ejecutivo, en declaraciones a Punto Radio.
De esta forma, se despejan algunas alternativas de algunos altos cargos del Gobierno (como Miguel Sebastián, jefe de la Oficina Económica de Presidencia) que planteaban eliminar esta deducción, siguiendo las líneas generales del programa del PSOE, en el que se abogaba por una simplificación de las exenciones e incentivos fiscales del impuesto.
No obstante, el Ministerio de Economía y Hacienda, que dirige Pedro Solbes, no tiene concretado aún qué pasará con los incentivos fiscales por compra de inmuebles. Se puede mantener la deducción pero con un recorte parcial, algo que iría por el camino marcado por Sebastián, o se pueden dejar en 'vía muerta' las deducciones actuales y no actualizarlas en función del coste de la vida, tesis compartida por el propio Solbes, que no gusta de cambios radicales en el tributo. Actualmente, los contribuyentes tienen limitada la deducción por compra de vivienda a un porcentaje (entre el 15% y el 25%) de las aportaciones realizadas cada año para el pago de la hipoteca, con una cantidad máxima (9.000 euros anuales). Si este límite no se actualizara, la deducción a aplicar representaría cada vez una parte más pequeña en relación con el pago de la hipoteca, un asunto que se busca desde el Gobierno con el ánimo de quitar fuerza a la demanda de inmuebles y por ende, a los desorbitados precios de la vivienda. No obstante, Hacienda ha garantizado que se van a respetar los derechos adquiridos por los que ya han comprado. Ello quiere decir que, pase lo que pase en la próxima reforma, los contribuyentes que ahora se están deduciendo por vivienda lo podrán hacer en sus mismos términos. No se garantiza lo mismo con los futuros.
Planes de pensiones
Zapatero aprovechó ayer para confirmar que 'habrá una reducción de la presión fiscal en las rentas del trabajo', una 'simplificación' del número de tramos del impuesto y una 'reordenación' en las ayudas fiscales por aportaciones a planes de pensiones sin que éstas desaparezcan. En el programa electoral del PSOE no se hace explícito un recorte en estas aportaciones pero sí se aboga por la eliminación de gran parte de las deducciones actuales. En relación al impuesto de sociedades, Zapatero apostó por un 'descenso' en el tipo máximo del impuesto (35%) para adaptarlo a los futuros cambios en el IRPF, como se propone también el programa electoral.
regularización El Gobierno frenará la 'entrada masiva' de inmigrantes
Otro asunto de relevancia para el Gobierno es la inmigración. Zapatero aseguró ayer que el Ejecutivo se concentrará en recortar la entrada masiva de inmigrantes. 'Frenaremos, no sólo la inmigración que está trabajando de manera irregular; vamos a frenar lo que representa una entrada masiva de inmigrantes' añadió a Punto Radio. El presidente insistió en que a España tienen que venir sólo aquellos que puedan trabajar. A su juicio, 'en control y requisitos de entrada' tiene que haber un mayor esfuerzo por parte de la UE. Zapatero añadió que toda la ciudadanía quiere que los inmigrantes que trabajan coticen a la Seguridad Social y contribuyan al sistema de pensiones, y que los empresarios les contraten de forma legal, garantizándoles sus derechos.La regularización de inmigrantes va a paso lento. Tan sólo 10.000 expedientes de normalización de trabajadores extranjeros en situación irregular han sido admitidos a trámite por la Administración en la primera semana de apertura del proceso extraordinario. Asociaciones de inmigrantes, ONG, sindicatos y empresarios reconocen que el proceso no va rápido. El presidente de la Asociación de Trabajadores Inmigrantes Marroquíes (Atime), Mustafá El M'rabet, consideró ayer que el ritmo es 'desolador', debido a los problemas planteados por confusión y falta de información sobre la documentación necesaria. El sindicato CC OO ha propuesto al Gobierno que documentos como la tarjeta sanitaria puedan cumplir la función de los certificados de empadronamiento en el proceso de regularización.Entre los empresarios, los más preocupados son los agricultores (Asaja). Consideran que el Ejecutivo no ha tenido en cuenta la estacionalidad de su trabajo para la oferta de plazas.