Lituania, la puerta del mercado ruso
Diego Rodríguez y Xavier Sotillos, de Garrigues, explican cómo el sistema lituano está orientado a atraer inversiones
Lituania es un Estado pequeño, de sólo 3,6 millones de habitantes, cuyo PIB per cápita apenas alcanza los 4.000 euros. El rápido crecimiento de su economía en los últimos años y su situación privilegiada como vía de acceso al mercado ruso hace de Lituania una jurisdicción económicamente atractiva.
Goza de una fiscalidad reducida, diseñada para atraer inversiones extranjeras. Ello se traduce, por ejemplo, en un tipo del impuesto sobre sociedades de sólo el 15%. La compensación de pérdidas con beneficios futuros, sin embargo, se limita a un periodo de cinco años.
La legislación lituana prevé una retención del 10% sobre los cánones satisfechos al extranjero, un 15% sobre los intereses y un 15% sobre los dividendos.
Existe, sin embargo, una exención para los dividendos que se distribuyen desde una sociedad lituana a su matriz extranjera, siempre que ésta participe en la primera en más de un 10% durante un periodo superior a un año. Esta disposición es incluso más ventajosa que la proporcionada por la Directiva matriz-filial de la Unión Europea.
Por otro lado, existe ya un convenio para evitar la doble imposición suscrito entre España y Lituania, que entró en vigor a finales de 2003.
El mismo reduce la retención sobre los intereses satisfechos desde Lituania a nuestro país, y viceversa, a un máximo del 10%, si bien, desde su entrada efectiva en la Unión Europea el pago de intereses desde España a Lituania estaría exento.
Lituania está en proceso de adaptar y armonizar su normativa interna de acuerdo con las directrices comunitarias. En el ámbito de la tributación directa, la Comisión Europea ya ha instado a este país a incluir en su legislación las provisiones de la directiva sobre intereses y cánones, que en determinadas circunstancias elimina la retención sobre el pago de este tipo de rentas de un estado miembro a otro. Por otro lado, se pretende incorporar también la directiva del ahorro a la normativa sobre tributación de personas físicas en Lituania.
Del mismo modo, la adopción de la normativa comunitaria más relevante se complementa con la aplicación de la directiva sobre fusiones, que favorece las operaciones de reorganización empresarial entre países de la UE al limitar en gran medida la tributación de las rentas que de ellas se puedan derivar.
En Lituania existen zonas económicas especiales que proporcionan incentivos a la inversión en forma de vacaciones fiscales durante seis años y una reducción del 50% en el tipo impositivo general en los siguientes 10 años.
La Comisión ya se ha pronunciado en contra de dichas zonas por entender que vulneran los principios comunitarios, con lo que es de esperar que este régimen especial sea progresivamente eliminado.
En cuanto a la tributación indirecta, la adhesión ha representado también la instauración de sólo dos tipos del impuesto sobre el valor añadido (IVA), el general del 18% y uno reducido del 5% para determinados bienes y servicios como el transporte público, los medicamentos o los libros.