Preocupación en Estados Unidos por los efectos en las familias de un alza de los tipos
La mayoría de los analistas piensa que la Reserva Federal (Fed) no empezará a subir tipos hasta que inflación y empleo empiecen a repuntar. No obstante, parte de los miembros de la propia Reserva ven ciertos riesgos en seguir con esta política monetaria, que tiene colocado los tipos en sólo el 1%.
El principal riesgo es que se pueda estar creando una burbuja de crédito en los consumidores, de perniciosos efectos una vez que las condiciones de precios y empleo permitan una subida de tasas.
Y es que los hogares norteamericanos han aumentado su endeudamiento a un ritmo superior al de sus ingresos incluso durante la crisis, gracias, en buena medida, a la actual política monetaria y a la posibilidad de refinanciar las hipotecas a un cómodo interés. Una subida de tipos cada vez más probable haría que muchos presupuestos familiares pudieran desestabilizarse. Como reconoce el Economic Policy Institute, aunque hay empleo, la calidad del mismo es peor.
Deuda de los hogares
Al presidente de la Fed, Alan Greenspan, no le preocupa el nivel de deuda de los consumidores, ya que el valor de sus activos es también alto.
Sin embargo, expertos como el profesor de Yale, Robert Shiller, están en contra de la opinión de Greenspan por la desproporción entre el ritmo del endeudamiento y el de los ingresos. Shiller cree que puede haber muchas bancarrotas, sobre todo, si el mercado de la vivienda deja de recalentarse y los precios se congelan o empiezan a bajar.
De la misma opinión es Roberto Rigobón del MIT y analista de la Oficina Nacional de Análisis Económico, informa Bloomberg.