Mejoran las perspectivas económicas en Alemania y Francia
Las perspectivas de actividad económica en Francia y Alemania, las dos primeras economías de la zona euro, descuentan un fuerte crecimiento económico en el cuarto trimestre de este año y los dos primeros de 2004, a juzgar por la opinión expresada por los empresarios alemanes en el índice IFO y las previsiones corregidas del Gobierno francés.
Los empresarios alemanes no parecen preocupados por la fortaleza del euro que, en teoría, lastra las exportaciones germanas fuera de la eurozona, y cada vez se muestran más optimistas sobre la recuperación económica. El índice de confianza empresarial que elabora cada mes el instituto IFO ascendió en diciembre en Alemania Occidental hasta 96,8 puntos, frente a 95,7 puntos de noviembre. Se trata de la octava subida consecutiva y el valor más alto de este indicador en casi tres años.
Especialmente significativo fue el avance del subíndice que mide las expectativas de la patronal sobre la situación económica futura y que escaló hasta su valor máximo desde noviembre de 1994.
El dato llega en un mes en el que el euro se ha apreciado un 3,5% respecto al dólar y bate récords históricos frente al billete verde casi a diario. La fortaleza de la moneda única es negativa para las exportaciones alemanas fuera de la eurozona, porque reduce su competitividad. Las más afectadas son las ventas a Estados Unidos, que representan un 10% del total. El comercio exterior supone un tercio del PIB alemán.
Junto al índice IFO, que no recoge aún la opinión sobre la reforma fiscal, los datos de pedidos industriales, confianza de los inversores y producción industrial mostraron este mes que la primera economía de la zona euro se encuentra en el camino de la recuperación.
La economía francesa, por su parte, crecerá un 1,7% al final del primer semestre de 2004, la previsión del Gobierno para el próximo año, anunció ayer el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos (Insee). La previsión del crecimiento del producto interior bruto (PIB), que incluso podría rondar el 2% en el conjunto del año próximo, se basa en las expectativas en alza para el cuarto trimestre de 2003 y los dos primeros de 2004.
Así, el Insee espera un incremento del PIB del 0,6% para el último trimestre del año, antes de pasar a un 0,7% en los tres primeros meses de 2004 y a un 0,5% en el segundo trimestre. 'Al contrario que en los dos años precedentes, en 2004 hay no sólo una oportunidad de mantener la previsión, sino de superarla', según el responsable de coyuntura del Insee, Michel Devilliers.
La demanda externa, clave del éxito
Tanto en Francia como en Alemania, la clave en la recuperación de las perspectivas económicas va aparejada a la mejora de la demanda externa. El presidente del IFO, Hans-Werner Sinn, dijo al canal de televisión CNBC que los datos de diciembre demuestran 'que el proceso de recuperación económica está en marcha y ha ganado fuerza'.Sinn añadió que la mejora de la confianza se produjo en todos los sectores de la economía alemana, excepto en el del comercio minorista. En Francia, según el Insee, 'la recuperación mundial se ha confirmado y los efectos del comercio en la zona euro son inmediatamente visibles, a pesar de la evolución desfavorable de los tipos de cambio'. 'Un nuevo ciclo industrial comienza, animado por el exterior, que revigorizará los pedidos de las empresas', añade.