Comunicar es esencial en los procesos de reducción de plantillas
Emprender una reestructuración de plantilla no es una tarea fácil. A la fuga de talentos y al descenso en la productividad debido al mal ambiente, se añade el del daño a la imagen de la empresa, tanto entre los propios trabajadores como frente a la opinión pública. Los expertos creen que una buena comunicación es esencial para evitar estos problemas. Planificar y comunicar. Estos son los dos elementos imprescindibles que debe tener en cuenta cualquier empresa con el fin de reducir los efectos negativos derivados de una reestructuración de plantilla. Son las conclusiones de los directivos que se han enfrentado con una reestructuración de plantilla y que ha recopilado en un estudio la empresa de recolocación Lee Hecht Harrison, del grupo Adecco. El informe analiza los principales problemas a los que se deben enfrentar los directivos a la hora de llevar a cabo una reducción de personal.
Reubicación
Una de las recomendaciones es hacer un seguimiento de las habilidades de los empleados y tener siempre en cuenta una posible reubicación, ya que, según el informe, con demasiada frecuencia las empresas cometen el error de no dedicar el tiempo suficiente a evaluar las habilidades de los empleados y adecuarlas a las necesidades de la empresa.
El estudio también recomienda que una vez anunciados los recortes se lleven a cabo lo más rápidamente posible. Además, para el director general de Lee Hecht Harrison en España, Francisco Huertas, las empresas deben mantener al día a sus empleados sobre el estado de la organización y el sector mediante el correo electrónico y las intranets corporativas para evitar la sorpresa por la eliminación de puestos. Es una buena fórmula para intentar hacer ver a los empleados por qué es necesaria la reducción de plantilla. Otro de los consejos para evitar males mayores es ayudar a los empleados que permanecen en la empresa a adaptarse a los cambios y definir el trabajo para que no descienda la productividad.