La industria de EE UU muestra los primeros síntomas de mejora
'En general, los datos no han sido una gran sorpresa, pero sus componentes dan lugar a un poco más de optimismo', dijo ayer David Rosenberg, economista para EE UU de Merrill Lynch, tras conocer ayer lo que se ha calificado como primer paso en el cambio de tendencia en la industria de este país. El índice del Instituto de Gestión de Oferta (ISM en sus siglas en inglés) pasó de los 45,4 puntos de abril a los 49,4 en mayo, según se hizo público ayer. La mejora no llega a tanto como para revertir la contracción industrial que implica estar bajo los 50 puntos, pero sí ha servido para avivar el optimismo al ser la primera subida desde diciembre.
Aunque los más cautos advierten que este índice estaba en los 55 puntos a comienzo de año, los analistas y los mercados han acogido el dato con moderado optimismo al sumarlo con la mejora de la confianza registrada en anteriores semanas, algo que puede mejorar las perspectivas de consumo e inversión. Entre los datos positivos que conforman este índice se encuentra el correspondiente a los nuevos pedidos que explora la tendencia para los próximos meses al referirse a la producción para los próximos meses. Este índice llega a 51,9 en mayo cuando fue de 45,2 en abril.
El optimismo americano por la mejora de un dato que habla por un séptimo de la economía, no se trasladó a Europa.
Contracción en la zona euro
Según el índice de compras de gestores, elaborado por la agencia Reuters, la actividad industrial en la zona euro se ha contraído inesperadamente durante mayo. Las causas de la rebaja de un índice que se queda en los 46,8 puntos, frente a los 47,8 de abril, se encuentran en la fortaleza del euro, que mina la capacidad exportadora, la caída de los pedidos y los despidos en las empresas.
Este dato, que como el americano indica que hay contracción si cae por debajo de los 50 puntos, queda así en su punto más bajo en los últimos 16 meses, según la agencia que lo elabora. 'Obviamente es muy decepcionante. Es mucho más débil de lo esperado', señalaba ayer Robert Lind, de ABN Amro en Londres. 'Claramente los datos provenientes de Alemania y Francia dan idea de una gran caída de las órdenes de exportación, lo que muestra el efecto de la fuerza del euro'.
La construcción empieza a mostrar fisuras
Para sorpresa de los que apostaban por una mejora en la construcción, este sector responsable del 5% del PIB americano cayó en abril un 0,3%, llegando a los niveles más bajos en los últimos cuatro meses, según el último informe del departamento de comercio. La rebaja no es nueva porque es el tercer mes en el que se registra una caída, pero los economistas habían esperado para este mes una mejora del 0,1%.La rebaja de actividad en este sector se ha detectado tanto en la actividad residencial (muy beneficiada por los bajos de los tipos de interés) como el no residencial. Mientras que se espera que la construcción de vivienda se vuelva a activar en el corto plazo, otro tipo de construcción más relacionado con la inversión empresarial puede tomar más tiempo en notar una mejora, según consideraban ayer algunos analistas.