Opel España redujo un 20% los números rojos el año pasado, a 64,5 millones
Opel España registró el año pasado unas pérdidas después de impuestos de 64,5 millones, frente a los 80,6 millones de 2001. Asimismo, las ventas y los ingresos de compañía han aumentado significativamente.
Opel España registró el año pasado unas pérdidas después de impuestos de 64,5 millones, frente a los 80,6 millones de 2001. Esta reducción de los números rojos ha ido acompañada de avances significativos en la producción y las ventas. La planta de Figueruelas (Zaragoza) fabricó 379.935 vehículos (358.000 en 2001) y elevó su facturación a 5.351 millones, frente a los 5.180 millones del ejercicio anterior.
En la presentación de resultados ayer en Zaragoza, el presidente, Juan José Sanz, calificó de 'abiertamente satisfactoria' la evolución de la planta española, en el contexto de un mercado europeo extraordinariamente difícil. Sanz subrayó que el ejercicio se ha visto condicionado por los gastos extraordinarios originados por la adjudicación del nuevo monovolumen Meriva, un elemento específico al que deben añadirse factores generales, como la dura competencia entre los fabricantes y la baja rentabilidad del sector.
El presidente de Opel se mostró confiado por el avance que supondrá la fabricación en Figueruelas del Meriva, que ya ha generado 560 nuevos contratos, 350 de los cuales firmados por los proveedores y el resto por la propia matriz. Opel vendió en el mercado español 155.887 coches, con una cuota del 10,6%.
La planta de Figueruelas ha alcanzado un récord de fabricación, que se sitúa en 1950 vehículos al día. Paralelamente, produjo 39.500 juegos de componentes, que fueron suministrados a las plantas de Azambuja (Portugal) y Eisenach (Alemania).
Sanz aseguró que las medidas contenidas en el Plan Industrial 'han colocado a la compañía en el buen camino' y mostró su confianza en la recuperación.