Las claves para invertir con opciones (I)
Antes de realizar estrategias con derivados hay que tener en cuenta algunas reglas como la de fijarse un objetivo de ganancia o pérdida
A lo largo de los últimos meses hemos pasado revista a numerosas estrategias de negociación con opciones, algunas especulativas, algunas de cobertura de riesgos. Ahora vamos a repasar una serie de nociones que son aplicables, en general, a toda la negociación con opciones y que constituyen un buen manual para ganar y no perder dinero -o para minimizar las pérdidas- con estos productos.
1. La primera regla es: venda si duplica su dinero. Esto es equivalente a decir que empiece con el fin en mente o que se fije un objetivo. Mucha gente no tiene claro cuánto debe subir o bajar una acción para conseguir beneficios, así que lo que hacen es comprar las opciones que menos valen, que son aquellas cuyos precios de ejercicio están más alejados del precio del subyacente y, por lo tanto, aquellas que necesitan mayor movimiento de los precios para ganar dinero. Lo que debe hacer es seleccionar una acción y basándose en criterios, como los fundamentales o técnicos, determinar cuánto puede subir o bajar esa acción y cuál va a ser su objetivo de beneficio. Una vez alcanzado ese objetivo, deshaga la posición y embolse las ganancias. No olvide que la avaricia rompe el saco y que la Bolsa puede darse la vuelta y comerse sus ganancias no realizadas. En inversiones especulativas es frecuente fijarse una ganancia del 100% sobre el dinero invertido como objetivo; para ello hay que determinar cuál será el movimiento del subyacente que le permita este objetivo.
Pongamos un ejemplo con opciones sobre el Ibex. Supongamos que cree que el Ibex va a caer después de las recientes subidas. El jueves el Ibex estaba a 6.406 puntos y las puts, con vencimiento el 16 de mayo y precio de ejercicio de 6.400, valían 240 euros. Si las volatilidades se mantienen estables, las puts valdrán 490 euros si el índice cae a los 6.000 puntos. Aunque este precio es aproximado porque también depende del tiempo que tarde el Ibex en caer (cuanto más tiempo pase, menos vale la opción), nos da una buena referencia de qué debemos esperar para duplicar la inversión. Si está de acuerdo con esperar una caída del Ibex hasta esos niveles, adelante, compre las puts. Las opciones sobre el índice son europeas, por lo que hay que esperar a vencimiento para su ejercicio, pero para realizar el beneficio puede vender las opciones y obtener la prima, no es necesario esperar al vencimiento.
También podríamos utilizar los futuros mini sobre el Ibex 35. En este caso vamos a calcular el retorno sobre las garantías, que son el dinero depositado al contratar el futuro y que nos devolverán al cerrar la posición; son 700 euros. Los futuros mini del Ibex están en estos momentos a 6.420 euros, para doblar la inversión de 700 euros necesitamos que el futuro se mueva a 7.210 si estamos comprados o a 5.720 si estamos vendidos. Si le parecen movimientos demasiado grandes, fíjese un objetivo más conservador o no utilice futuros.
2. Venda la mitad y recupere su inversión original. Por prudencia, si una vez que la inversión ha alcanzado su objetivo usted decide no vender, al menos venda las suficientes opciones como para recuperar su inversión original. De este modo no arriesga su dinero por si el mercado se da la vuelta y deja una parte para poder seguir ganando dinero si el mercado se sigue moviendo a su favor.
3. Convierta su posición en un diferencial alcista o bajista. Esto se logra mediante la venta de opciones a un precio de ejercicio superior o inferior. Si la opción dobla su valor y no quiere hacer todo el beneficio -o sólo cierra la mitad del beneficio-, puede convertir la posición en un diferencial. Por ejemplo, si había comprado una call que ha duplicado su valor, puede vender una opción con un precio de ejercicio superior y con el mismo vencimiento, de este modo convierte su estrategia en un diferencial alcista con calls. Si la prima que recibe con las opciones vendidas es igual al coste original, habrá recuperado su inversión y podrá aún beneficiarse -de modo limitado- de un movimiento alcista. En este escenario la máxima ganancia potencial es la diferencia entre los dos precios de ejercicio; a esto habría que restarle la diferencia en el precio de las primas -compradas y vendidas- cuando las haya.