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Guerra en Irak

El FMI rebaja el crecimiento mundial al 3,2% y alerta sobre los problemas de fondo

Se esperaba que la economía global iniciara la senda del crecimiento lentamente. Esto fue en septiembre de 2002. Medio año más tarde, el análisis pone énfasis en la lentitud de esta recuperación, mucho mayor de lo esperado, que ha forzado al FMI a rebajar sus previsiones. 'La recuperación se ha ralentizado, particularmente en los países industrializados', aseguran.

'Un conflicto más prolongado en Irak podría tener un severo impacto en la economía global por el elevado precio del petróleo, la caída de la confianza de los consumidores y los empresarios y un deterioro en los mercados', afirma el informe. El organismo contempla también un cuadro más optimista y asegura que, en caso de que haya una rápida resolución del conflicto, se puede experimentar 'una mejora significativa de la economía por encima de las previsiones a finales de 2003'.

El economista jefe del FMI, Kenneth Rogoff, advirtió que, además de la guerra, hay otros problemas como los efectos de la burbuja en el mercado de valores y en el de la vivienda, el recorte de las inversiones empresariales, los riesgos de deflación y el menor dinamismo del comercio mundial entre otros. 'La recuperación, simplemente, se ha retrasado', explicaba Rogoff.

Críticas a Bush

Las previsiones del organismo pasan por la rebaja de previsiones de EE UU en cuatro décimas, para dejar el crecimiento en un 2,2%, y vuelve a recordar, en tono admonitorio, que este país sigue siendo la locomotora mundial sin que nadie logre reemplazarle. Rogoff no pudo evitar referirse al estímulo económico que el presidente de EE UU, George Bush, quiere poner en marcha con una rebaja de los impuestos, especialmente los que gravan los dividendos. 'Simpatizo con la propuesta, pero creo que el momento es el peor, con la guerra, los casi históricos déficit y el aumento en los gastos de seguridad'. En este punto, Rogoff aseguró que esta partida va a tener un fuerte impacto en distintos sectores durante varios años y que la seguridad penalizará el comercio mundial.

'Creemos que el crecimiento mundial podría reducirse un cuarto de punto' en el hipotético caso de que se reactivara un escenario de amenaza terrorista. En las previsiones del FMI se insiste en que sería importante que la comunidad internacional 'trabaje rápidamente para reconstruir la confianza y enmendar los problemas con las naciones en la preparación de la guerra y asegurarse especialmente que no hay un daño económico'.

Las previsiones para la zona euro no permiten animar a los que creían que esta zona puede unirse a la reanimación del crecimiento. La zona euro crecería un 1,1% en 2003, un 1,2% por debajo de lo esperado hace medio año por la débil demanda, la apreciación del euro y una política fiscal restrictiva. Para España se espera un crecimiento del 2,2% en 2003 y un 3,1% en 2004, con una inflación de 3,2% y una tasa de paro del 11,4% para comenzar a ceder en 2003 (10,9%).

La mayor víctima de esta lenta apreciación económica es, precisamente, uno de los países mas fuertes, Alemania, cuyo 0,5% de crecimiento supone una rebaja de 1,5 puntos respecto a las anteriores previsiones. 'Alemania no ha absorbido los problemas de la anterior década ni se ha terminado de recuperar con fuerza del proceso de integración', aseguraba ayer Rogoff. El economista jefe advertía que la productividad en el Este seguía estando por debajo de la zona occidental y daba la bienvenida a las reformas que promociona Gerhard Shröder. A preguntas de los informadores, Rogoff rechazó la posibilidad de un contracción de liquidez en la banca alemana.

El FMI reconoce, sin embargo, que el sistema bancario alemán está en una situación delicada por su escasa rentabilidad, pero se rechaza hablar de crisis. Si acaso de la emergencia de las tensiones financieras de las aseguradoras de vida y los fondos de pensiones.

Tampoco Japón, en prolongada recesión, va a ver la luz a final del túnel este año, ya que la demanda se espera que siga cayendo y que 'la deflación persista'.

Optimismo asiático

La mejor cara posible la ponen los países emergentes del área asiática que han crecido por encima de las expectativas y China, 'cuya situación se espera que se mantenga sólida en 2003'. Pero puede ser por poco tiempo. El Fondo expresa su preocupación por la caída de las inversiones en tecnologías de la información, clave para estas economías. Otros países emergentes tienen peor cuadro. Se trata de la mayoría de los países latinoamericanos que se suman a ese paso lento de la recuperación. El FMI concede que después de la 'profunda recesión' de 2000-2002 la actividad ha comenzado a repuntar, aunque avisa de que la vulnerabilidad se mantienen en países como Argentina, Brasil, Uruguay y Venezuela.

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