El Ibex marca otro mínimo anual y pierde el soporte de los 5.500
La esperanza de consolidar, aunque fuera con pinzas, el repunte de ayer se había evaporado ya a media sesión para el selectivo español. Así, el Ibex ha vuelto hoy a tocar mínimos: si ayer pivotó sobre los 5.600 puntos, hoy se han quedado en 5.452,40. Preocupante es el hecho de que esté a sólo un 1,7% de distancia del mínimo de octubre, cuando el Ibex cayó al nivel más exiguo en siete años. Entre los descensos más pronunciados, ha destacado el del grupo Telefónica. Salvo Terra, que ha logrado anotarse un 0,51%, la matriz ha perdido un 4,05%, seguida de Móviles, con una caída del 3,46% y de TPI, que cayó un 2,19%. El sector bancario también marcó una escarpada curva bajista, con SCH un 4,75% abajo.
A dos horas del cierre, el mercado alemán sigue llevándose la palma del retroceso en la renta variable europea, registrando caídas que rondan el 5%. Ello se suma al recorte del 5,19% de su valor que ha sufrido en los últimos dos días, y del 25% en lo que va de año, además de acumular la -hasta ahora desconocida- séptima caída consecutiva. Francfort lleva a sus espaldas varios lastres. Además de la incertidumbre prebélica y las malas perspectivas de la economía en general, y de la suya en particular, gigantes como Deutsche Telekom o Volkswagen no son portadores de buenas noticias.
La principal referencia de hoy ha sido el buen dato de déficit comercial de Estados Unidos, que ha registrado el mayor descenso desde diciembre de 2001, aunque no ha tenido repercusión feliz en los mercados, demasiado preocupados con las relaciones Washington-Bagdad. En Europa, ha sido una buena noticia la producción industrial francesa de enero, que creció un 1,5%, básicamente gracias el tirón de la energía. Es un dato que mejora las previsiones, pero no ha bastado para animar a un CAC que se ha devaluado un 3,6% en la jornada. Menos que Londres, que ha perdido un 4,8%.
Los inversores siguen atentos a los 'tira y afloja' diplomáticos en torno a la segunda resolución de Naciones Unidas para el desarme de Irak. Reino Unido y Estados Unidos han dejado una puerta abierta a una ampliación del ultimátum de diez días que lanzaron el viernes tras el informe de los inspectores de la ONU, y que termina el próximo día 17.