El capital riesgo destinó sólo el 5% de la inversión a las nuevas tecnologías
El capital riesgo español parece haber abandonado la nueva economía, a juzgar por la raquítica cifra de inversión destinada en 2002 a proyectos de tecnologías de la información.
Según los datos de Capital & Corporate, que elabora cada año un listado de todas las operaciones de inversión producidas en España, durante 2002 sólo fueron a parar 40 millones de euros a empresas de nuevas tecnologías, lo que supone menos de un 5% del total del capital riesgo invertido.
La cifra contrasta con la producida el año pasado, 140 millones de euros (11,6% del total), pero llama mucho más la atención si se la compara con el año 2000. Entonces, en pleno auge de la llamada nueva economía, el volumen de capital destinado a financiar proyectos de tecnologías de la información ascendió al 30% del total, es decir, 330 millones de euros.
'Las cifras son deprimentes, hay que encontrar soluciones para revitalizar este sector', afirmó ayer José Ángel Sarasa, consejero delegado de la sociedad de inversión Baring Private Equity Partners, durante un acto organizado por la patronal del sector informático Sedisi y la Bolsa de Madrid.
La causa más importante que expusieron ayer los directivos de los fondos de inversión presentes (3i, Baring y Granville Baird Capital) para su repliegue ante las nuevas tecnologías fue 'la dificultad de encontrar emprendedores de verdad'.
Los fondos de alto riesgo quisieron dejar claro que actualmente existe dinero para invertir, pero 'la distorsión de los últimos tres años ha quemado a los inversores. Las start ups tecnológicas lo tienen ahora muy complicado para que algún fondo les dé dinero', aseguró Mark Happey, consejero delegado de 3i.
Por sectores, son las comunicaciones y la informática las que más interés despiertan entre los inversores (57% y 82%, respectivamente), mientras que la electrónica atrajo el año pasado sólo el 0,2% del capital de los fondos de alto riesgo.