Ruiz-Beato preside Anfac en una fase de transición para las automovilísticas
Jesús Ruiz-Beato, vicepresidente de Nissan Motor Ibérica, fue elegido ayer presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) para los próximos dos años. Su mandato estará determinado por los cambios que la industria debe afrontar para adaptarse al nuevo reglamento europeo del automóvil.
Como era esperado, Ruiz-Beato fue elegido por consenso de los 13 fabricantes de vehículos en sustitución de Jaime Carvajal, presidente de Ford, que ha encabezado Anfac desde junio de 2000. La presidencia de Anfac rota cada dos años entre los representantes de las marcas con producción en España.
Ruiz-Beato es abogado del Estado y miembro de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación. Ha sido secretario de los consejos de administración de Dragados y de Aurea. Es responsable de Nissan Motor Ibérica, donde no hay presidencia. Nissan fabrica en Barcelona los modelos Terrano y Almera Tino y a partir de septiembre hará una furgoneta para la alianza con Renault. La marca japonesa tiene además una fábrica de motores en Cuatro Vientos (Madrid) y una de camiones en Ávila.
Los dos próximos años serán decisivos para la industria del automóvil. En octubre entra en vigor el nuevo reglamento de la Comisión Europea sobre distribución y venta de coches, que trata de liberalizar el sector. La industria europea se ha movilizado contra esa norma, que podría abocar a una reestructuración de las redes de concesionarios y a una armonización de precios antes de impuestos en la UE. Anfac quiere aprovechar para reclamar una rebaja del impuesto de matriculación que parece improbable tras su cesión a las autonomías.
Anfac debe negociar además el futuro de los planes Prever, que incentivan fiscalmente la renovación del parque de automóviles hasta final de 2003, así como la transposición de la directiva sobre reciclado de coches, con exigencias más rigurosas sobre impacto ambiental.