Siif Energies convierte en electricidad los desechos hortícolas de Almería
El sector agrícola bajo plástico de Almería ha dado un paso más para eliminar y dar salida a sus residuos y desechos. A la gestión de sus residuos (fitosanitarios, plásticos y material vegetal) -que le contrató, a finales de febrero, la patronal Coexphal-Faeca, que agrupa a la mitad del sector-, suma ahora la eliminación de los desechos vegetales a través de una planta de biomasa, que construirá la sociedad francesa Siif Energies.
La empresa invertirá 40 millones de euros en la planta, que se ubicará en la zona de El Ejido, el principal núcleo hortícola de Almería. 'La capacidad máxima de tratamiento será de 250.000 toneladas anuales, la mitad de las que genera el sector en Almería', indica Jesús Cabrera, portavoz de Siif Energies, 'para producir, mediante su combustión, 25 megavatios de electricidad'. La fábrica utilizará toda la materia vegetal que generan los invernaderos, como plantas y frutos de desecho o hierbas y se espera que esté lista para mediados del próximo año.
Antes de la combustión, la planta incorporará un proceso para eliminar cualquier resto de fitosanitarios y pesticidas. 'Es una patente desarrollada por la Universidad de Almería que hemos adquirido para evitar cualquier peligro de intoxicación en la combustión de la materia vegetal', explica Cabrera.
La instalación ofrecerá también la posibilidad de convertir en agua dulce el agua salada de los acuíferos, con capacidad para regar 500 hectáreas de invernaderos, 'a precios más bajos de lo que pagan los agricultores', destaca el portavoz.
Para desarrollar la planta de biomasa, Siif Energies se ha aliado con la patronal local Coexphal-Faeca. 'Aportaremos entre un 5% y un 10% de la inversión', indica el gerente, Juan Colomina. Asimismo, el proyecto está abierto a la participación de otras empresas o entidades, como las compañías que gestionan el tratamiento del resto de residuos, Albaida y Ejido Medio Ambiente.
A medio plazo, Siif Energies planea, 'si la demanda lo permite', construir otra planta similar en el Poniente almeriense. La compañía francesa, propiedad de un empresario francés y participada por EDF, la eléctrica pública gala, tiene en marcha otra planta de biomasa en Baena (Córdoba), a partir de restos vegetales del olivar, con 30 millones de inversión.