El grupo de Zara prevé abrir más de 150 nuevas tiendas este año
El grupo textil gallego Inditex, que saldrá a Bolsa el próximo 23 de mayo, cuenta con 213 locales en propiedad que están valorados en 40.000 millones de pesetas, según el folleto de OPV remitido a la CNMV. Estos establecimientos representan el 27% de la superficie comercial. El grupo, que cuenta con 1.080 tiendas en 33 países, ha frenado en los últimos años la adquisición de locales por las dificultades del mercado inmobiliario, especialmente en el extranjero.
El grupo textil y de moda Inditex, que incluye las cadenas Zara, Massimo Dutti, Pull & Bear, Bershka y Stradivarius, sale a Bolsa con un patrimonio inmobiliario valorado en 40.000 millones de pesetas (precio de compra), según el folleto de la oferta pública de venta (OPV) remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. La compañía sale al mercado bursátil valorada entre 1,4 y 1,54 billones de pesetas.
Inditex cuenta en total con 213 locales en propiedad, lo que representa el 27% de la superficie de venta del grupo. A cierre del ejercicio pasado, la compañía contaba con 1.080 tiendas en 33 países.
Según el vicepresidente y consejero delegado del grupo, José María Castellano, la localización es uno de los elementos fundamentales de la compañía, "ya que al no hacer prácticamente publicidad, nuestra presentación ante el cliente es la propia tienda y la ubicación que tenga".
En el folleto de la oferta pública de venta, se especifica que la localización y el tamaño adecuados de todas sus cadenas, pero especialmente de Zara, su marca estrella, "es el principal criterio de la política inmobiliaria, ya que Zara utiliza sus propias tiendas como vehículo principal de comunicación con sus clientes". En este sentido, el tamaño objetivo de uno de estos establecimientos es de 1.200 metros cuadrados de venta.
Freno en las adquisiciones
Castellano reconoce que hace unos años se adquirían más locales porque el mercado estaba más barato, pero que ahora los precios y las condiciones, sobre todo en el extranjero, hacen muy difícil la compra de locales. "En Inglaterra, por ejemplo, es casi imposible adquirir ningún inmueble. De todos modos, nosotros siempre analizamos todas las posibilidades, compra, alquiler u otra", señala.
Según se explica en el folleto de OPV, "aunque la gran mayoría de las tiendas se explotan en régimen de alquiler, Zara tiene la propiedad de algunos de los inmuebles que ocupan sus tiendas. El objetivo de la compañía es siempre lograr las localizaciones adecuadas, analizando las posibilidades para ello, aún cuando ello suponga la adquisición del local. En este sentido, la existencia de tienda en propiedad de Zara se deriva del aprovechamiento de oportunidades de adquisición ventajosa de buena parte de los locales".
La mayor parte de los establecimientos en propiedad pertenecen a la cadena Zara (146), seguidos de Pull & Bear (47), Bershka (ocho locales) y Massimo Dutti y Stradivarius, os seis inmuebles cada una. Según el folleto, "de los locales en los que el grupo posee la titularidad jurídica plena de la propiedad, siete locales se encuentran aportados como garantía de operaciones financieras, dos de ellos en el extranjero y cinco en España".
En la estructura organizativa del grupo gallego que cuenta con más de un centenar de sociedades incluidas las filiales en el extranjero, hay algunas empresas que "desarrollan actividades de construcción o actividades inmobiliarias" y que son "complementarias de las actividades principales".
La importancia que Inditex concede a la localización de sus tiendas tanto en España como en el extranjero, hace que la política de inversiones para los próximos años, así como la entrada en nuevos países esté condicionada por el capítulo inmobiliario.
En la información remitida a la CNMV se reconoce que "existe un especial grado de incertidumbre sobre la cuantía de las inversiones" debido a varios factores entre los que figura la apertura de tiendas ligada a "las oportunidades inmobiliarias adecuadas a los requisitos exigidos por el grupo", y la "negociación de contratos inmobiliarios" que incluyen diferentes modalidades económicas que a su vez varían dependiendo de las regulaciones legales de los países en los que se pretenden abrir dichas tiendas. También se añaden otra serie de condicionantes relacionados con las indemnizaciones por abandono de locales comerciales, la remodelación estructural del edificio y la adquisición de los inmuebles.
Arrendamientos
En todo caso, el alquiler de locales comerciales representa, después del coste personal, el mayor gasto operativo del grupo textil gallego.
Su importe se encuentra entre el 5% y el 10% de la cifra de venta de negocios consolidada que el año pasado fue de 435.049 millones de pesetas (2.615 millones de euros).
En el folleto de OPV se especifica que en las cuentas del ejercicio 2000, las inversiones en inmovilizado inmaterial corresponden fundamentalmente a derechos de traspaso, que ascendieron a 9.902 millones de pesetas (59,51 millones de euros).
En 1999 el pago realizado por este mismo concepto fue de 6.004 millones de pesetas (36,08 millones de euros), una cantidad inferior a la del año anterior cuando los derechos de traspaso supusieron al grupo un desembolso de 7.192 millones de pesetas (43,22 millones de euros).
Por otra parte, en la memoria del ejercicio correspondiente al año pasado se valoran los terrenos y construcciones del grupo en 71.392 millones de pesetas (429 millones de euros) frente a los 57.961 millones de pesetas (348,35 millones de euros) del año anterior.
En este capítulo se incluyen la nueva sede del grupo y las fábricas que se construyeron en el ejercicio.
El grupo prevé abrir más de 150 tiendas este año, el 30% en España
Inditex ha desarrollado una estrategia de crecimiento que se basa en cinco puntos: la profundización de la actividad en los países en los que ya está presente, la apertura selectiva de nuevos mercados, la internacionalización progresiva de todos los formatos, el crecimiento orgánico del grupo y el lanzamiento de una cadena de lencería (Oysho) .
Según la compañía "si bien no se descarta la posibilidad de adquisiciones que en el futuro permitan aprovechar oportunidades", la previsión es que una gran parte del crecimiento de los próximos ejercicios se deba a factores orgánicos.
En este contexto, el grupo textil gallego prevé abrir este año entre 150 y 200 tiendas, de las que aproximadamente el 30% serán en España, según se recoge en el folleto de la OPV. Del total de nuevos establecimientos, se estima que una cuarta parte serán de la cadena Zara. El coste medio de apertura de una tienda de esta marca oscila entre los 250 y los 300 millones de pesetas, con una plantilla media de 40 personas.
El grupo también espera que la apertura en centros comerciales sea el principal conductor del crecimiento en España.
Inditex prevé invertir 215.000 millones de pesetas (1.292 millones de euros) entre 2001 y 2003, el 80% de los cuales será para la apertura de tiendas.
En cuanto a la expansión internacional, se dará prioridad a los mercados europeos como Portugal, Francia, Reino Unido, Alemania, Holanda y Austria, debido al tamaño de sus mercados, a la estabilidad económica y a la proximidad geográfica y cultural. También se prevé la entrada en otras áreas como Latinoamérica, Asia y países del este de Europa, aunque ello dependerá de los gustos de los consumidores y de las oportunidades inmobiliarias.
Stradivarius, su última compra muy rentable
Inditex no tiene previsto, de momento, nuevas adquisiciones, aunque como buena compañía gallega dice que tampoco se cierra a las oportunidades que pudieran aparecer en el mercado. Uno de los motivos es que tiene que consolidar su última adquisición, la cadena de ropa juvenil Stradivarius, que compró en 1999.
El precio que Inditex pagó por el 90,05% de Stradivarius fue de 18.010 millones de pesetas (108,24 millones de euros), una cantidad que entonces el sector consideró elevada, pero que ya está mostrando su rentabilidad. De hecho, Stradivarius representó el año pasado el 2,8% de la cifra de venta consolidada de Inditex, es decir, aportó al conjunto del grupo 12.064 millones de pesetas (72,51 millones de euros) y, según fuentes del grupo, es una de las cadenas con mayor potencial de crecimiento junto a Bershka, con la que compite.
A Inditex, que cuenta con unos fondos propios de 194.822 millones de pesetas (1.171 millones de euros), todavía le quedan pendientes tres pagos de 3.400 millones de pesetas cada uno que deberán desembolsarse en 2002 y 2003, así como otros 1.010 millones que se harán efectivos en 2005.
En el momento de adquirir Stradivarius, esta compañía contaba con unos fondos propios de 899 millones de pesetas. Como consecuencia de la diferencia entre el importe pagado y dichos fondos, en el proceso de consolidación se afloró un fondo de comercio de 15.573 millones de pesetas (93,60 millones de euros), de los que se amortizaron 483 millones en 1999 y 1.555 millones en 2000. La amortización se hará en diez años.