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Cortefiel comprará grupos extranjeros si falla la OPA sobre Adolfo Domínguez

El grupo Cortefiel adquirirá cadenas extranjeras de distribución que le aporten crecimiento y valor internacional si fracasa la OPA sobre Adolfo Domínguez. La compañía ha puesto en marcha un plan de expansión en Alemania, donde cerró la compra de la cadena alemana Werdin el pasado mes de enero para convertir sus 74 tiendas en establecimientos de la marca Springfield. Hace unos días inauguró las primeras tiendas reconvertidas en la marca española.

El grupo Cortefiel está dispuesto a "comprar cadenas que aporten crecimiento y valor internacional a la compañía", según señala el presidente de la sociedad, Gonzalo Hinojosa. Cortefiel, inmerso en pleno proceso de OPA (oferta pública de adquisición) sobre Adolfo Domínguez, considera que en España hay pocas posibilidades para cerrar una compra, al margen de la operación con el grupo gallego. Por tanto, si no cuaja la OPA sobre Adolfo Domínguez, la compañía que preside Hinojosa buscará oportunidades fuera de España con el fin de afianzar su presencia internacional.

La intención es concentrar este desarrollo exterior en Alemania, donde el pasado mes de enero cerró la compra del 80% de la cadena de ropa Werdin para reconvertir sus tiendas en establecimientos de Springfield. Werdin, hasta entonces propiedad del gru-po Douglas, con quien también tiene un acuerdo para desarrollar una cadena de perfumerías en España, cuenta con 74 tiendas y 28.000 metros cuadrados de superficie comercial en conjunto. Según Hinojosa, se trata de afianzarse en el mercado alemán y desde allí abordar otros países europeos.

En este sentido, Francia es uno de los objetivos a medio plazo. El grupo espera que, con la presencia que sus marcas tienen en España y el desarrollo que obtenga en Alemania, pueda hacer una pinza sobre Francia para entrar con fuerza en el país vecino.

Cortefiel también está presente en otros mercados, como Austria y Hungría, donde, según Hinojosa, en los últimos meses se ha registrado un importante crecimiento de las ventas (en torno al 30%).

Reaperturas

Cortefiel ha invertido 4.363 millones de pesetas (26,22 millones de euros) en la adquisición y remodelación de los establecimientos Werdin. Esta cadena facturó el año pasado 13.173 millones de pesetas (79,17 millones de euros) y obtuvo un beneficio de 220 millones de pesetas (1,32 millones de euros). Cortefiel inauguró hace unos días las primeras tiendas reconvertidas en Springfield que se suman a las 21 que el grupo español ya tenía en el mercado alemán. Francfort y Saarbrücken han sido los primeros centros reformados y adaptados a la imagen y diseño de la marca española. Según la empresa, en los primeros días de funcionamiento con la nueva imagen, las ventas de estas tiendas se han duplicado.

Springfield tiene previsto reconvertir otras 22 tiendas entre septiembre y octubre de 2001, convirtiéndose en la compañía de moda masculina con una mayor red de distribución en Alemania. El resto de las tiendas, hasta superar las 90, se abrirán durante 2002.

Según Gonzalo Hinojosa, una de las ventajas que aportan los locales de Werdin es su buena ubicación (en el centro de las ciudades y en zonas muy comerciales), y el precio de los alquileres, más bajos que los de las tiendas originales de Springfield.

Para apoyar esta operación, Springfield ha puesto en marcha una campaña publicitaria y de medios dirigida al mercado alemán.

El grupo gallego

Respecto a la OPA que Cortefiel ha lanzado sobre Adolfo Domínguez, la compañía gallega remitió el viernes a la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) un comunicado en el que señalaba que "no existe ningún acuerdo, convenio o pacto de cualquier naturaleza, verbal o escrito, entre Adolfo Domínguez Fernández y Myrurgia o cualesquiera otros accionistas" para el ejercicio concertado de los derechos de voto de que dispongan en dicha sociedad.

Cortefiel ha condicionado la OPA a obtener el 51% de la empresa gallega, algo que le resultaría difícil de conseguir si los principales accionistas (entre los que se encuentran varias cajas de ahorro) se oponen a la operación.

El diseñador y fundador de la compañía tiene el 30,4%, mientras que Puig (que llegó a Adolfo Domínguez tras la adquisición de Myrurgia) ha elevado su participación desde el 9,5% hasta el 11,05% desde que se lanzó la oferta pública de adquisición.

Según la información remi-tida a la CNMV, "el contrato con Myrurgia, del 13 de noviembre de 1989, para la creación de líneas de produc-tos de perfumería y cosmética con la denominación Adolfo Domín-guez prevé, entre otras posibles causas de terminación, la siguiente: por cambios sustanciales en la composición del accionariado de Myrurgia o de Adolfo Domín-guez e Hijos que implique la pérdida de control de las sociedades por parte de los actuales accionistas" de la cadena.

 

Los analistas creen que la oferta no saldrá adelante

Cuando Cortefiel lanzó la OPA sobre Adolfo Domínguez, los analistas destacaron que la operación era beneficiosa para ambas compañías. Pero la negativa de Adolfo Domínguez (AD) y el escaso interés de Cortefiel por aumentar su oferta (nueve euros) hacen difícil que ésta tenga éxito.

"No va a salir adelante", apunta David Peña, de Caja Madrid Bolsa. "Tampoco creo que Cortefiel lance un precio superior, sería entrar en una dinámica que no beneficiaría su imagen", añade este experto. Muy parecida es la opinión de Ignacio Chacón, analista de Ibersecurities, quien además asegura que el precio es "escaso".

La mayoría de firmas de análisis había aconsejado a los accionistas de AD que acudieran a la OPA. No obstante, la negativa de esta compañía puede acarrearle de nuevo retrocesos en Bolsa. "Corre el riesgo de volver a caer en el olvido", sostiene Valérie Kramer, de Société Générale.

Adolfo Domínguez, que ha perdido un 56% desde su estreno en Bolsa en 1997, se ha revalorizado un 79% este año, animada por las especulaciones de OPA. La oferta de Cortefiel tampoco borra de la mente de los expertos la posibilidad de que un grupo extranjero engulla a la compañía del diseñador gallego. Pero ésta parece una opción cada vez más remota. La sueca Hennes & Moritz, muy interesada en expandirse por el mercado español, no pasa por sus mejores momentos. Asimismo, tampoco parece probable que un grupo extranjero esté dispuesto a mantener la marca. "Los candidatos cada vez son menos", apunta Kramer.

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