Tesla ha patentado un sistema que va a revolucionar... ¡los limpiaparabrisas!
¿Es posible un cambio radical en ese terreno?
Hay inventos por lo que no pasan los años y cuantos más cumplen, más inamovibles parecen. Y ese es el caso de los limpiaparabrisas, un ingenio que sigue igual desde su creación en 1903 y que parece que nadie se atreve a tocar, no sea que piensen que cualquier otra alternativa siempre será peor.
El caso es que, quitando la eficiencia, diseño, funcionalidad y demás mejoras que se han realizado sobre ellos, un limpiaparabrisas es idéntico en su concepto al aparecido por vez primera hace 114 años por lo que hay quien piensa que lo mismo ha llegado el momento de darle un toque de innovación. ¿Y quién ha sido? Efectivamente, Tesla.
¿Revolución en los parabrisas?
Con esa premisa de mejorar lo que ya funciona, Tesla se puso a desarrollar un nuevo sistema de parabrisas con la intención (imaginamos) de instalarlo en sus vehículos en el medio plazo. Al fin y al cabo, de triunfar, no solo los veríamos en los coches de la compañía de Elon Musk, sino también en los de otros constructores que podrían animarse a comprarle el invento al australiano.
El esquema de cómo funcionaría lo tenéis justo aquí debajo: se trataría de un brazo vertical que se mueve de izquierda a derecha y de derecha a izquierda limpiando toda la luna. Obviamente estaría por ver cómo de rápido es en los momentos en los que cae mucha agua y, su sobre, su eficiencia cuando se acumula demasiada suciedad en el cristal.
Una ventaja que sí tiene es que, a diferencia de los limpiaparabrisas convencionales, este invento de Tesla ocupa toda la superficie del cristal por lo que en coches como los Model 3, Model S o, sobre todo, el Model X, tienen una especial importancia por la enorme luna frontal que llevan.
Sea como fuere y como ya ocurre en otros ámbitos como la tecnología móvil, etc., veremos el plazo en el que nos movemos para ver este invento en funcionamiento. Si esta patente supera la fase de pruebas y convencen los resultados a los responsables de Tesla, mínimo tendríamos que echarle un lustro para que se haga realidad. Si no más.
Sea como fuere, bienvenidas todas las ideas disruptivas capaces de ir un paso más allá en terrenos que, como el de los parabrisas, llevan más de 100 años haciendo su trabajo sin que nadie se queje. ¿O sí?
