Software, esa es la solución oficial al escándalo Volkswagen
Hace varias semanas, en Estados Unidos se descubrió el fraude de Volkswagen, según el cual la multinacional alemana había infringido la normativa contra la contaminación. El problema afecta también a los modelos de Volkswagen y el resto de sus marcas en Europa, y en nuestro país hay coches afectados por el que, desde el principio, se ha titulado como 'dieselgate'. El escándalo Volkswagen, no obstante, ya tiene una solución para hacer cumplir a los modelos afectados con la normativa en materia de emisiones contaminantes.
Así se va a solucionar el escándalo Volkswagen
Volkswagen solucionará el problema de las emisiones con una 'actualización de software'
A grandes rasgos es exactamente eso, una 'actualización del software' de la centralita que gestiona la combustión de sus motores diésel. Ahora bien, en el sector del automóvil hablaremos de 'reprogramación'. Y esta, concretamente, es la solución oficial que Volkswagen dará a sus coches afectados en el territorio europeo, pero concretamente a los motores de 2.0 litros. Y según han asegurado desde la multinacional, la 'reparación' de las emisiones irregulares no llevará más de media hora según la aplicación de esta modificación.
Por otro lado, también han anunciado los cambios que se harán en los modelos con motor de 1.6 litros EA189, y en este caso sí se aplicrán cambios mecánicos. No afectará a la potencia, anuncian, y consistirá en introducir un transformador de corriente para regular con mayor precisión el flujo de aire que se introduce en la combustión.
El escándalo Volkswagen va a durar, al menos, un año más
Otro detalle interesante tiene que ver con los plazos, y es que según ha anunciado la marca se comenzarán a efectuar estas revisiones desde enero de 2016, y se pretende concluir a finales del mismo año. No obstante, han anunciado -y sabemos- que las llamadas a revisión han comenzado en nuestro país, aunque citando a los clientes para comienzos de año.
Así, según las declaraciones más recientes desde la multinacional, todo apunta a que estos mismos cambios serán los que se apliquen a otros coches afectados de marcas como Skoda, Audi o Seat, que pertenecen al mismo grupo y han heredado la problemática de los motores fabricados y distribuidos por Volkswagen. Evidentemente, estas soluciones no se darán para coches nuevos, que se supone cumplen con la normativa vigente contra las emisiones.