Conéctate de forma segura a redes WiFi públicas con estos consejos
El uso de puntos de acceso WiFi públicos puede ser muy atractivo con la llegada del verano y los viajes, pero los usuarios deben conocer los riesgos que ello implica y tomar precauciones para mejorar su seguridad. Algunos consejos pueden prevenir problemas y aumentar la protección de los usuarios y sus datos al usar ese tipo de redes de conexión.
A través de las redes WiFi desconocidas los usuarios pueden dejar al descubierto sus dispositivos, brindando una oportunidad de oro a los hackers para acceder a su información personal o al control de los equipos. Al acceder a una red que no se conoce los riesgos son muy elevados y por ello hay que extremar las precauciones.
El primer consejo pasa por disponer de la máxima protección posible en los equipos antes de introducirse en una red de WiFi pública. La protección de los dispositivos se puede enfocar a través de dos aspectos fundamentales. El primero hace referencia a mantener actualizadas todas las aplicaciones y el sistema operativo. La mayoría de las actualizaciones buscan eliminar brechas de seguridad, por lo que contar con la última versión del sistema operativo y de las apps instaladas ofrecerá mayores garantías.
El segundo aspecto que ayuda a la protección de los dispositivos es contar con herramientas concretas. Antivirus y sistemas que ayuden a mejorar la seguridad pueden ser útiles en equipos de usuarios que vayan a ser expuestos a redes públicas no conocidas.
Protección de cuentas y servicios
El segundo consejo para aquellos que vayan a conectarse a redes WiFi públicas está enfocado a complementar al anterior. Más allá de proteger los dispositivos en sí, los usuarios deben proteger sus cuentas y servicios. En este sentido, utilizar la verificación en dos pasos que ofrecen servicios como Google puede ser de gran ayuda. Así, en caso de que las protecciones de los equipos no sean suficientes, los atacantes externos se encontrarían con una barrera de seguridad más.
De la misma manera, preparar las opciones de los equipos es un refuerzo de seguridad más. En este caso, lo mejor es desactivar opciones para compartir contenidos de forma automática y no aceptar que los dispositivos se conecten por sí solos a las redes que encuentren. En combinación con equipos totalmente actualizados, software de seguridad y opciones de control concretas, estos pasos mejorarán las garantías de seguridad.
Buscar redes WiFi oficiales
Los usuarios que acostumbren a utilizar redes WiFi habrán comprobado que suele existir un gran número de puntos de acceso. Es muy importante que solamente se utilicen aquellos en los que se confíe. Por ejemplo, si se quiere aprovechar la conexión de un restaurante, lo ideal es preguntar el nombre exacto del punto de acceso. En ocasiones los hackers crean puntos que imitan nombres oficiales para engañar a los usuarios y preguntar por la denominación oficial puede ayudar a evitar sustos.
Una vez consultado el nombre oficial del punto de acceso, es interesante comprobar si cuenta con seguridad. Muchos establecimientos cifran sus sistemas de conexión con contraseñas WPA2, que ayuda a mantener la seguridad de la red.
Hacer un uso responsable
Una vez que se ha comprobado que los equipos y servicios de los usuarios están preparados y se dispone de una confirmación oficial sobre el punto de acceso, el siguiente consejo es realizar una navegación responsable. En este sentido, los usuarios deben ser conscientes de que la red que utilizan no es suya y por ello deben limitar su navegación a contenidos que no incluyan información sensible.
La realización de operaciones de banca online o el envío de datos privados son acciones que habría que descartar. Lo mejor es no acceder ni compartir datos sensibles mientras se usan ese tipo de redes puesto que nunca se sabe si pueden estar siendo utilizadas con intenciones nocivas.
En relación al consejo anterior, los usuarios pueden mejorar también su seguridad al usar redes de WiFi públicas si navegan por páginas con protocolo HTTPS o utilizan redes protegidas VPN. Se trata de sistemas que suman capas de seguridad y que complementan las medidas antes mencionadas.
Seguir prácticas de seguridad habituales
A todos estos consejos hay que sumar las clásicas recomendaciones de seguridad. Utilizar una contraseña robusta, nunca repetir password entre servicios y desconectarse de la red si no se está usando son algunas de esas recomendaciones.
Por último, siempre hay que recordar que el acceso a redes WiFi públicas siempre debe ser la última alternativa. Los usuarios que puedan utilizar su propia conexión tendrán más garantías de seguridad y así disminuirán los riesgos.