Las claves: cara y cruz contable y medioambiental del gran apagón
El uso masivo de ciclos combinados supone una lamentable subida de casi el 50% de las emisiones de CO2


Las consecuencias del apagón se siguen notando no solo en el debate público y en el balance energético, sino, también, en las cuentas de las grandes compañías energéticas y en el medioambiente. Con el miedo a que este fenómeno vuelva a producirse, y ante la constatación de que evitarlo puede pasar por aumentar la generación síncrona, el balance de los nueve primeros meses del año refleja que el operador ha abrazado la producción con gas, que se dispara un 50%. La operativa reforzada se refleja a su vez en los resultados de las compañías: en la cara de la moneda está Naturgy, la líder de ciclos combinados en España y la mayor importadora de gas, que aumentó el beneficio bruto de explotación de sus plantas en España en un 84%, hasta los 304 millones de euros. No es de extrañar, pues, su posicionamiento moderado respecto de la prolongación de la vida de las nucleares. En la cruz está el extracoste en restricciones técnicas que supone la operación reforzada, que se calcula en 3.300 millones para el sector. Aunque el gran perdedor es, sin duda, el medioambiente: el uso masivo de ciclos combinados supone una lamentable subida de casi otro 50% de las emisiones de CO2.
El BBVA coge aire en los mercados tras su batacazo
Tras el fracaso de su opa sobre el Sabadell –que ha tenido demasiado tiempo bloqueadas a las dos entidades– el BBVA coge aire en los mercados. Ayer lanzó una emisión de cocos –bonos contingentes convertibles– para comprobar el ánimo del inversor, y pudo ver que este le tiene confianza, aunque vaya a navegar solo. Las cuentas respaldan esta percepción, con un beneficio histórico entre enero y septiembre. Así como su valoración en Bolsa: la semana pasada superó momentáneamente los 100.000 millones de valor en Bolsa y acecha el segundo puesto como mayor banco de Europa. No es una mala manera de fracasar.
El inversor español valora la tranquilidad...y el ladrillo
Con las Bolsas marcando récord tras récord –la española incluida– y con el dinero entrando a raudales en los mercados financieros, los inversores españoles están más que nunca...en fondos conservadores. La mitad del dinero canalizado a través de vehículos de inversión españoles está en fondos de renta fija, garantizados, monetarios...todo un crisol de productos de no muy alto retorno, pero que aportan a quien cree en ellos una sensación fundamental: la tranquilidad. El inversor español cumple así con su fama de no ser muy arriesgado, y solo el tiempo dirá si tiene razón, o si se le ha vuelto a escapar un jugoso tren. Por lo pronto, España sigue estando por encima de la media en vivienda en propiedad. Y esa, como la IA, sube en todo el mundo.
La frase
Dejaremos que Pfizer y Novo se peleen por MetseraDavid Ricks, CEO de Eli Lilly
La rueda de la inteligencia artificial sigue girando
Más madera. OpenAI, la empresa emergente sin ánimo de lucro –por ahora– ha firmado un nuevo acuerdo milmillonario, esta vez con Amazon y valorado en 38.000 millones de dólares, por el que usará su infraestructura de computación para dar vida a sus productos. Paradójicamente, esta infraestructura se compone en buena parte de los famosos semiconductores de Nvidia, empresa que anunció hace algo más de un mes que invertirá 100.000 millones de dólares en Open AI. Todo queda en familia en la interminable rueda de la inteligencia artificial, sobre la que están empezando a sonar con fuerza las acusaciones de burbuja. Nvidia y Amazon subían ayer con fuerza en Bolsa, para mayor deleite de los inversores y sus carteras.

