El regreso del Moves III, una oportunidad para consolidar y mejorar
España cuenta con el talento, la industria y el compromiso necesarios para liderar esta transformación
La reactivación del plan Moves III es una gran noticia para la movilidad eléctrica en España. El sector necesitaba certidumbre, y el Gobierno ha respondido. Ahora, con este nuevo impulso, tenemos la oportunidad no sólo de consolidar el crecimiento del mercado, sino también de reflexionar sobre cómo hacer que este tipo de ayudas funcionen aún mejor en el futuro.
Tras semanas de incertidumbre, el regreso del plan Moves III ofrece un necesario punto de apoyo para quienes apuestan por la movilidad eléctrica. Con una dotación de 400 millones de euros y ayudas de hasta 7.000 euros para la compra de vehículos eléctricos, y hasta 9.000 euros para vehículos comerciales, el programa vuelve a poner en marcha incentivos fundamentales para seguir avanzando hacia una movilidad más sostenible. Además, se contemplan ayudas para la instalación de infraestructuras de recarga, que cubrirán entre el 20% y el 80% de la inversión, en función del tipo de beneficiario. Un paso clave, ya que el despliegue de puntos de carga es tan importante como la renovación del parque automovilístico para que la electrificación sea realmente viable para todos.
Otro aspecto positivo es que las ayudas tengan carácter retroactivo desde el 22 de enero, lo que permitirá que personas que adquirieron un vehículo eléctrico en los últimos meses puedan beneficiarse del programa. A ello se suma la simplificación de algunos procesos administrativos, lo que debería facilitar el acceso a particulares, autónomos y pequeñas empresas. Son señales claras de que se han escuchado muchas de las demandas planteadas por el sector.
Y no llegan en cualquier momento. En el primer trimestre del año, las matriculaciones de vehículos electrificados crecieron un 45%, superando las 44.000 unidades. La ciudadanía responde cuando hay voluntad política y marcos de apoyo estables. Por eso, este tipo de medidas no pueden tener un efecto intermitente: deben dar continuidad y confianza para que particulares, empresas y administraciones locales puedan planificar con perspectiva.
Desde el ecosistema de la movilidad eléctrica, celebramos esta reactivación. Es un paso en la buena dirección. Pero también creemos que es una oportunidad para dar un salto cualitativo: pensar cómo podemos mejorar este tipo de programas para que sean más accesibles, rápidos y eficaces.
El Moves III ha demostrado ser una herramienta útil, pero aún tiene margen de mejora. La tramitación sigue siendo compleja en muchas comunidades, las ayudas no siempre llegan con la rapidez deseada y los ciudadanos aún encuentran barreras para acceder a los incentivos. El futuro de los incentivos pasa, sin duda, por un modelo más ágil y directo, que elimine la intermediación autonómica y garantice que el apoyo económico llegue al comprador en el mismo momento de la adquisición. Esta es una reclamación constante del sector y una condición necesaria para que el mercado funcione de forma eficiente.
España cuenta con el talento, la industria y el compromiso necesarios para liderar esta transformación. Ahora que el Moves III está de nuevo en marcha, tenemos la oportunidad de ir más allá: avanzar hacia un sistema de incentivos más robusto, previsible y alineado con una visión de largo plazo.
Este es un buen momento para reconocer el esfuerzo realizado, pero también para construir, desde el diálogo público-privado, un modelo de apoyo a la movilidad eléctrica que esté a la altura del reto que enfrentamos. Si aprovechamos esta oportunidad, podremos acelerar la electrificación del parque móvil, atraer más inversión, generar empleo cualificado y consolidar a España como un referente europeo en movilidad sostenible.
Enric Asunción es fundador y CEO de Wallbox.
