JP Morgan apuesta por la inversión en IA, infraestructuras de energía y defensa para 2025
La división de banca privada del banco estadounidense ve atractivo en las grandes cotizadas europeas
Las perspectivas para 2025 de JP Morgan Banca Privada arrancan con un aviso a navegantes: después de una subida del S&P 500 del 24% en lo que va de año y de una escalada del oro del 27% ”no prevemos una repetición de las rentabilidades obtenidas este año″. Desde el área de banca privada del banco estadounidense creen que el equilibrio entre los vientos en contra -se ha desvanecido la obsesión por la recesión y se ha moderado la inflación- y los vientos de cola -caída de los tipos de interés y la mejora de los beneficios empresariales- sugieren que los rendimientos de las carteras superarán al del efectivo, pero ve probable que las rentabilidades se normalicen y vuelvan a tasas históricas.
A pesar de la fuerte subida acumulada por la Bolsa estadounidense, los expertos de JP Morgan Banca Privada mantienen su apuesta por la renta variable de EE UU frente a la europea para el próximo año. Eso sí, instan a que los inversores hagan hueco en sus carteras para las grandes cotizadas europeas. “A pesar de los retos de productividad que afronta Europa, creemos que los inversores no deberían pasar por alto a las grandes compañías europeas en 2025. Es importante recordar que las 50 mayores empresas europeas obtienen, aproximadamente, solo el 40% de sus ingresos de Europa, lo que convierte a los campeones nacionales incluidos en este grupo en auténticos actores globales”, comenta Erik Wytenus, responsable de Estrategia de Inversión de JP Morgan Banca Privada para Europa, Oriente Medio y África.
Así, explican que “aunque el ‘excepcionalismo estadounidense’ dispone de unos sólidos fundamentos, abogamos también por complementar las posiciones en EE UU con diversificación internacional, también en Europa, que se ve favorecida por la relajación de la política monetaria impulsada por el BCE”. Según sus estimaciones, no es descartable que la institución lleve los tipos de interés de la zona euro por debajo del 2% a finales de 2025. Esto les lleva a argumentar que más allá de la fuerte apuesta de los inversores por las grandes tecnológicas estadounidenses, empresas con exposición a la inteligencia artificial, las infraestructuras energéticas o de sectores como el aeroespacial o el de defensa son opciones a tener en cuenta.
En el plano económico, desde JP Morgan Banca Privada estiman que el relajamiento de la política monetaria por parte de los bancos centrales seguirá impulsando el crecimiento económico. Tanto que, en el caso de Europa, apuntan que “la vieja economía europea ha tenido sus dificultades últimamente, pero la economía del mañana ya está tomando forma”. Por su parte, en EE UU prevén que el ciclo de rebaja de tipos se alargue hasta el primer trimestre de 2026 con el tipo de interés oficial en el 3,5%. “Esto proporciona un entorno favorable para los activos de riesgo, que beneficia a sectores como la vivienda, el sector inmobiliario comercial y la productividad, al tiempo que fomenta una incipiente reactivación de la negociación”, asegura Jacob Manoukian, responsable de Estrategia de Inversión para Estados Unidos de JP Morgan.
Este entorno de tipos bajos beneficiará, según la entidad, a los activos de riesgo, como la Bolsa o los bonos de alto rendimiento (high yield). Más allá, apuestan por fondos alternativos de duración indefinida, los llamados evergreen, que según reconocen este año ha recibido gran interés por parte de sus inversores.
Ante el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y el auge de los partidos antisistema en ciertos países, desde JP Morgan creen que la atención de los inversores debería ir más allá de los resultados electorales y del posible impacto en la deuda soberana y en el déficit, y analizar el impacto de las políticas en el ámbito económico y de inversión. “En un contexto de cambios globales en el poder gubernamental, los inversores deben vigilar los riesgos que plantean los políticos antisistema. Más allá de la derecha y la izquierda, el ascenso de los partidos antisistema podría incrementar la volatilidad política y económica, lo que refuerza la necesidad de contar con carteras de inversión resilientes”, afirma Nur Cristiani, responsable de Estrategia de Inversión de JP Morgan para América Latina.