Estée Lauder sufre su mayor caída en Bolsa, un 23%, tras anular sus previsiones de beneficios
La empresa estadounidense achaca sus problemas a la débil demanda en China y reduce el dividendo de 0,66 dólares a 0,35 dólares por acción
Estée Lauder, la icónica empresa de cosméticos con sede en Nueva York, ha retirado sus previsiones financieras para este año y ha reducido el dividendo de 0,66 dólares a los 0,35. La revisión coincide con el relevo en la cúpula: el nuevo CEO Stéphane de La Faverie asumirá el cargo en enero de 2025, y según la empresa obedece a la débil demanda en China. El anuncio ha hecho que las acciones se desplomen el 23% en la apertura del mercado este jueves, la mayor bajada en la historia de la compañía. Aunque el S&P 500— índice en el que cotiza Estée Lauder —se anota un comportamiento positivo del 22% en el año, impulsado por el furor tecnológico de los Siete Magníficos, con el desplome de hoy la empresa con sede en Nueva York profundiza sus números rojos, y en 10 meses ya ha perdido más de la mitad de su valor en Bolsa. Se coloca como la cuarta empresa con peor desempeño en el índice, solo por detrás de Dollar Tree, Intel y Walgreens Boots.
La retirada de las previsiones (guidance, en la terminología financiera) y la reducción del dividendo sugieren que la situación financiera de Estée Lauder es más grave de lo calculado, pues la firma ni siquiera ha podido cuantificar el deterioro financiero, y de ahí el fuerte castigo en Bolsa. La empresa ha lidiado con una disminución de la cuota de mercado en EE UU y con el peor desempeño de las ventas en China (de donde provienen el 20% de sus ingresos). El daño ha sido particularmente grave en las tiendas libres de impuestos (duty free) de los aeropuertos. La caída en las ventas en China ha sido de un porcentaje de dos dígitos, arrastrada por la débil demanda de sus marcas La Mer y Estée Lauder. La situación ha llevado a la empresa a prever (con un informe de agosto que no se ha retocado) una caída de hasta un 8% en las ventas del trimestre actual en comparación con el mismo periodo del año anterior.
En paralelo, la empresa afronta una transición de liderazgo, con Stéphane de La Faverie asumiendo el cargo de CEO en enero de 2025. La incertidumbre sobre la nueva dirección ya había generado dudas entre los inversores: de La Faverie afrontará el desafío de revertir la caída en las ventas y demostrar a los inversores que el plan de recuperación heredado de su predecesor, Fabrizio Freda, funciona. De lo contario, deberá desarrollar una nueva estrategia de negocios, algo que parece más probable tras los acontecimientos de este jueves.
En el trimestre que terminó el 30 de septiembre, las ventas cayeron un 4%, y la empresa reportó una pérdida neta de 156 millones de dólares (144 millones de euros), en gran parte debido a cargos asociados con litigios relacionados con la seguridad y los posibles efectos adversos del uso de talco en productos cosméticos. La empresa, no obstante, ha sugerido que puede haber luz al final del túnel: las nuevas medidas de estímulo económico en China podrían presentar un potencial de estabilización y crecimiento a medio y largo plazo para el sector de la belleza de lujo, aunque la empresa anticipa fuertes declives a corto plazo en la industria y en el comercio minorista de viajes en Asia.
Este año, de hecho, ha sido particularmente difícil. La empresa ya había reducido su perspectiva de crecimiento anual en agosto y durante los últimos dos años Freda ha recortado repetidamente las previsiones, lo que ha dado la impresión a Wall Street de que los ejecutivos han perdido el control de la situación. El mal desempeño, en todo caso, no es exclusivo de esta empresa. L’Oréal, por ejemplo, también ha reportado resultados decepcionantes para los analistas (sustentados por igual por la baja demanda China). Aunque la empresa francesa depende menos de este mercado que Estée Lauder, pierde un 1,95% de su valor este jueves y en el año ya acumula una caída de un cuarto de su capitalización. Otros índices que miden el comportamiento del sector también caen este jueves: el MSCI World Consumer Staples retrocede un 0,96%; el Dow Jones US Personal Products Index lo hace a un ritmo del 2,94% y el lujo, medido por el S&P Global Luxury Index, se deja el 1,67%.