Legal Management Forum: Los bufetes de abogados le pierden el miedo a la inteligencia artificial
El evento jurídico del año arranca en un contexto de máxima expectación para las firmas legales, en plena experimentación con la tecnología generativa

La facturación por horas no morirá en los bufetes; los equipos de júniors no desaparecerán ni se contratará menos abogados jóvenes—sí cambiarán sus tareas— y la factura en servicios legales no se abaratará —más bien la previsión apunta a lo contrario: que las tarifas suban—. Es indudable que la inteligencia artificial generativa está impactando en la anatomía de los bufetes, pero aún está lejos de ser el “apocalipsis” que muchos analistas predijeron. Más que una amenaza, el sector legal ha visto una oportunidad: por un lado, para quitarse tareas superfluas y no facturar menos; por el otro, para asesorar a las empresas y por supuesto cobrar por ello.
La 12ª edición del Legal Management Forum ha reunido este martes a los bufetes de más poderío del panorama español en el auditorio del edificio Mutua Madrileña, para compartir estas ideas y tendencias. El escenario es inaudito por dos razones: la inteligencia artificial no solo ha sacudido los cimientos de un sector tradicionalmente conservador y sus dinámicas de trabajo (existen asistentes virtuales que pueden redactar en segundos documentos que antes al abogado le exigían horas, incluso días), sino que también ha abierto jugosas líneas de negocio. Y se confirma que las firmas se han lanzado a prestar asesoramiento en este nicho.
La diferencia respecto a hace un año es que los bufetes han aceptado el juego sin complejos: la inteligencia artificial ya no es una amenaza sino un tren al que todos se suben. La pregunta que muchos se hacen es cómo invertir en estas herramientas y medir resultados palpables. Un estudio reciente del Instituto de Tecnología de Massachusetts revela que el 95% de las organizaciones que invirtieron en soluciones de IA durante el último año no logró ningún retorno.
El que es considerado el ágora de la abogacía de élite —organizado por la Fundación Aranzadi LA LEY y el think tank Inkietos con el patrocinio de Santander y Mutua Madrileña— trató esta y otras cuestiones que preocupan al sector, como la entrada de fondos de capital en sus estructuras poder, el auge de los socios capitalistas, la tendencia mundial hacia las fusiones y las concentraciones de firmas, las posibles brechas de seguridad por el uso de asistentes virtuales entre los abogados (cada vez más de moda) o la nueva relación de los abogados internos y externos con la IA.
En un día clave para el sector jurídico, la presidenta de la Fundación Aranzadi LA LEY, Cristina Sancho, inauguró el Legal Management Forum destacando “la importancia de la colaboración y la evolución en un entorno de transformación constante”, trasladando además el saludo de S.M. el Rey Felipe VI a los asistentes presenciales y a las universidades conectadas. Sancho agradeció el apoyo de los patrocinadores y colaboradores, con especial mención a Banco Santander, representado por Alicia Muñoz Lombardía.
En la apertura, Mercedes Carmona, presidenta de Inkietos y directora jurídica de Becton Dickinson para España y Portugal, subrayó que “el foro no es una sucesión de charlas, sino un espacio de reflexión y cocreación para generar valor”. Por su parte, Muñoz Lombardía enfatizó que “solo el 5% de las compañías está logrando resultados reales con la inteligencia artificial”, insistiendo en la necesidad de “una brújula y una estrategia clara” para aprovechar su potencial transformador.
Estas fueron las principales conclusiones de cada una de las intervenciones de la sesión plenaria del Legal Management Forum 2025.
Cultura empresarial: la clave del éxito

La directora del bucerius center on the legal profession, Madeleine Bernhardt, defiende la idea de que la verdadera palanca para el éxito de la inteligencia artificial reside más en la cultura organizacional que en la programación tecnológica. Reconocida internacionalmente por su trabajo en el liderazgo dentro del mundo legal, la profesora Bernhardt ha ofrecido la conferencia inaugural del Legal Management 25, organizado por la Fundación Aranzadi LA LEY e Inkietos.
En su ponencia El algoritmo oculto del liderazgo en la era de la IA: hay que empezar por la cultura, no por el código, Bernhardt ha enfatizado que, en la era de la IA, “la verdadera transformación no vendrá solo de la tecnología, sino de la transformación humana, de nuestra capacidad para adaptarnos, para impulsar nuevas formas de trabajar y colaborar”. De ahí la importancia de que los profesionales jurídicos “integren la inteligencia artificial en su práctica diaria sin perder el enfoque humano, ya que la mayor palanca de liderazgo para aprovechar con éxito la IA no es la IA. Es la cultura”.
La experta ha instado a los líderes de las organizaciones a “reconocer la cultura como un activo estratégico” y a “dedicar tiempo y recursos a la eliminación de inconsistencias entre la cultura deseada y los sistemas y procesos dentro de las firmas legales”.
Ha afirmado en este sentido que el objetivo de la cultura es generar en los miembros de la organización comportamientos adaptativos, “ya que estos son la ventaja real para ser competitivos, porque es lo que nos hace diferentes”. Para lograrlo la clave es generar un ambiente de confianza: “el equipo tiene que trabajar en un entorno de seguridad psicológica para conseguir un alto rendimiento… que no haya conflictos no es siempre una buena señal, porque muchas veces se requiere tener conversaciones incómodas”.
Madeleine Bernhardt ha hecho hincapié en las incoherencias en las que a menudo incurren las organizaciones: “Si dices que quieres que las personas colaboren más, pero solo recompensas el desempeño individual, inevitablemente fomentarás comportamientos individualistas y competitivos”, ha advertido.
“La factura legal será más cara”

¿Supondrá la inteligencia artificial el fin de la facturación por horas? ¿Serán más baratos los servicios de los bufetes? Los abogados in house no se muestran demasiado optimistas. Según las conclusiones de la primera mesa de debate, que ha moderado Eugenia Navarro, consultora de LOIS, resulta poco probable que las firmas legales abaraten sus tarifas, sino más bien lo contrario. Y ello a pesar de que tareas que antes requería horas —o incluso días— ahora puedan resolverse en apenas minutos.
José Julio Figueroa, general counsel de Acciona, ha sido contundente al respecto: “Si se cobra por el valor añadido, puede que incluso se cobre más”, remarcó. Así lo ha corroborado también Idoya Arteagabeitia, directora de regulación corporativa de Telefónica, quien coincide en que “no parece que el trabajo legal vaya a bajar en precio”. Pero la experta descarta la imagen apocalíptica donde muchos abogados irán al paro: en su opinión la inteligencia artificial “no sustituirá el trabajo de los profesionales”, sino que permitirá que “aporten más valor”. Es decir, no habrá recortes de plantilla en las firmas. No hay que olvidar, incidieron los expertos, que las herramientas de inteligencia artificial no son gratuitas y exigen inversiones.
Por su parte, Pablo Hernández-Lahoz, director de asuntos legales corporativos de AENA, reprochó la falta de estándares de transparencia: “Echo en falta que se me comunique si los despachos están utilizando inteligencia artificial en sus trabajos e informes”. Sobre este punto, Ignacio Legido, socio director de legal en BDO Abogados, reconoció que “cada vez hay más exigencia respecto a la transparencia”. Legido ha reconocido que la transformación de las firmas legales es indudable a la hora de asesorar a sus clientes. Prueba de ello es la presencia cada vez más evidente de ingenieros, informáticos y perfiles técnicos, lo que hace cinco años era casi impensable.
¿Ha muerto el abogado todoterreno?

¿Son necesarios los equipos híbridos que integran perfiles jurídicos y no jurídicos? ¿Qué profesionales están demandando las firmas jurídicas? A estas preguntas ha dado respuesta la ponencia del Legal Management Forum moderada por Pablo Galán, director de Recursos Humanos de Aranzadi LA LEY, en la que han intervenido Jezabel León, manager New Law & Digital en Repsol; Anna Marra, project management, y Blanca Rodríguez Lainz, directora global de Talento en Ontier.
Según ha dicho Pablo Galán, abogado en Dikei Abogados, Garrigues y en el Canal de Isabel II durante los 20 primeros años de su carrera, no está claro que la función de los abogados sea la misma ahora que en los próximos 20 años. “No sé si va a ser así”, ha señalado el director de Recursos Humanos de Aranzadi LA LEY. “Hemos cambiado mucho, pero poco a poco”, ha coincidido Rodríguez Lainz. “Hemos pasados de estructuras rígidas” a entornos más flexibles.
La llegada de la inteligencia artificial (IA) a las firmas es el acelerador que está cambiando el rumbo del sector. Aunque la destreza de los abogados está cambiando. “Tareas que veo que van a seguir siendo clave en la función del abogado son la interpretación jurídica, el diseño de estrategias contractuales, la negociación de contratos críticos, la defensa, la toma de decisiones, la supervisión y la gobernanza”, ha señalado Jezabel León. Por el otro lado, en lo que respecta al “cambio de mentalidad”, Ana Marra ha dicho que “el conocimiento vertical y horizontal” que funcionaba hasta ahora en la abogacía va a cambiar: “El abogado que construye, que busca soluciones colectivas, que crea red” será más necesario que nunca.
Para tener lideres “capaces de retar e incomodar hace falta generar una cultura capaz de tolerar el error”, ha señalado la directora global de Talento de Ontier. Y eso necesariamente va ligado a un cambio en la mentalidad de los bufetes.
Los fondos revolucionan el sector legal

La tercera mesa de debate ha abordado un tema nuclear que inunda cada vez más titulares y se habla en los corrillos del sector legal: la entrada de fondos en los despachos de abogados. ¿Será tendencia en el sector legal? ¿Cómo deciden los fondos la firma a la que invertir? ¿Están las firmas preparadas para dar la bienvenida a los socios capitalistas en las cúpulas de poder? Todas estas cuestiones tuvieron su respuesta en la mesa que fue moderada por Carlos García-León, socio director de Legal Reputation y miembro de Inkietos.
Hugo Écija, fundador y presidente ejecutivo de Ecija ha señalado en su intervención que la entrada de Alia Capital Partner a su firma estaba predestinado. “Quien nos conoce sabe que el paso natural era dar la entrada de un fondo”, ha reconocido. El presidente de Ecija no ha dudado en reconocer que el private equity supone un salto clave para el crecimiento empresarial. “Sin un fondo puedes integrar cuatro firmas anuales, pero con un fondo puedes integrar hasta diez”. No obstante, también ha admitido que la entrada de fondos no es tan sencillo. “Los inversores son muy selectivos y con una firma sin estructura, ni marca ni estrategia probablemente la empresa no funcione en el mundo de los fondos de inversión”. La clave, explica, es tener “un management especializado y una facturación a doble dígito”.
Miguel Riaño, presidente de Carbonia Investments, señaló que la entrada de fondos en los despachos va a ser una realidad. “Mas temprano que tarde veremos a despachos salir a bolsa”, ha afirmado. No obstante, ha advertido que algunas firmas “tendrán éxito y otras no, todo dependerá del modelo de negocio en cada caso”. Durante su intervención, el experto ha adelantado que “a despachos más pequeños que se van a unir y van a formar un proyecto más grande”. En síntesis, el experto ha resumido que el sector legal va a tener “grandes inversiones en todos los segmentos, lo que es muy beneficioso para el sector legal”.
Agentes de IA, el siguiente escalón en el sector legal

El primer Let’s Talk! del Legal Management Forum 2025 corrió a cargo de Elena González-Blanco, responsable de IA y datos para startups y Unicornios para EMEA en Microsoft, que destacó el momento decisivo que vive la inteligencia Artificial (IA), especialmente en la evolución de los modelos de lenguaje hacia agentes de IA.
Durante su ponencia la experta ha señalado que estos agentes no sólo responden, sino que actúan, conectan datos y ejecutan tareas de manera autónoma, emulando una intermediación inteligente capaz de procesar y aprender de información compleja. Sus aplicaciones, ha afirmado la experta, ya impactan sectores como la salud, las finanzas, la educación y el ámbito legal, donde se usan para elaboración y revisión de contratos, gestión de cumplimiento, predicción de riesgos, manejo de procesos documentales complejos y búsqueda semántica en bases de datos.
González-Blanco ha repasado la historia de la IA desde los años 50, citando al precursor de la computación Alan Touring que consideraba que “la madurez de la IA se alcanzaría cuando una persona no pueda distinguir si interactúa con otro humano o con una máquina”. Hoy, la IA ha avanzado gracias a tres factores clave: la gran cantidad de datos generados y procesados en tiempo real, la supercomputación y los modelos fundamentales de IA que hacen posible la interacción mediante lenguaje natural, como ChatGPT.
Así, “los modelos de lenguaje funcionan convirtiendo palabras en tokens y seleccionando los siguientes términos más probables para construir respuestas, pero que siguen siendo máquinas probabilísticas sin capacidad de pensamiento autónomo”. Ahora se pasa de la IA generativa a agentes inteligentes que no solo responden sino que también ejecutan tareas, como validar gastos o crear contratos, adaptándose a procesos específicos y datos propios de cada usuario o empresa.
Finalmente, González-Blanco ha enfatizado que estos avances representan una evolución tecnológica, ofreciendo al sector legal la oportunidad para liderar la transformación mediante el uso responsable, seguro y regulado de la IA. La experta ha alertado, finalmente, sobre retos como el consumo energético, la necesidad de marcos regulatorios claros y los riesgos de desinformación, instalando a los profesionales legales a ser protagonistas en el debate sobre la regulación y aplicación ética de la IA en el futuro próximo.
La IA como gran oportunidad para dar su lugar al abogado

En la mesa titulada “Humanizando la IA” se ha debatido sobre la implementación de herramientas tecnológicas en las empresas y firmas legales. Cristina Retana, directora de contenidos e innovación en Aranzadi LA LEY, ha dirigido una charla sobre como enrolar a los profesionales en esta revolución, los éxitos y fracasos de la inteligencia artificial en este entorno, qué casos de uso son más comunes y en qué posición deja la tecnología a los abogados, en la que han participado Virginia Beltramini, general counsel and secretary of the board en Moeve, Francesc Muñoz, CIO en Cuatrecasas, y Noemí Brito, MA co-head of data, digital and technology law en KPMG Law. Beltramini centró la conversación con una información reciente. La primera batalla entre el abogado robot y el humano ya se ha producido y “la IA ya nos supera en diez puntos en pruebas de investigación y concepto jurídico”, advirtió. Esta realidad, defendió, “nos da visión de dónde debemos de apretar como profesionales. Nosotros somos fuertes en comprensión textual y en creatividad jurídica”.
Un punto de partida para la implementación de esta tecnología en las organizaciones, algo más complicado por el factor humano, señaló Francesc Muñoz: “La tecnología es fácil, lo complicado somos las personas”. El CIO de Cuatrecasas hizo énfasis en la necesidad de generar una cultura de cambio y acompañar a los equipos para que la abracen sin tanta resistencia. En el bufete, ha comentado esta implementación está centralizada en una estrategia que abarca todas las líneas de actuación —desde formación a la gobernanza pasando por los casos de uso— lo que “hace el despliegue más fácil”, reconoció. Con la tecnología no siempre se tiene éxito, ha advertido recordando algún fracaso con la machine learning, una herramienta no adaptada al lenguaje, “pero hay que ser consciente y reconocerlo con humildad”.
Noemí Brito, por su parte, defendió que un buen uso responsable y respetuoso con los principios deontológicos de la abogacía es una “gran oportunidad para empoderar al profesional y darle su lugar”. La experta señaló que este cambio implica “reimaginar el sector legal y repensar dónde aportamos valor los profesionales”.
Del papel al contrato inteligente: el futuro del derecho

Eduardo Abad, socio responsable de Innovación y Digitalización en Garrigues, expuso en el último let’s Talk del Legal Management Forum 2025 los retos y oportunidades que enfrenta la abogacía en la era digital. Subrayó el socio de Garrigues “que la asesoría jurídica tradicional ya no es suficiente para atender las demandas que plantea el ecosistema digital, por lo que es imprescindible que los abogados asuman el papel de tecnólogos para no perder terreno frente a consultores y sistemas automatizados”.
Abad destacó que muchas funciones que antes realizaban los abogados han sido absorbidas por otras profesiones o plataformas tecnológicas, lo que obliga a repensar el modelo de trabajo, especialmente la facturación por horas. “La era del papel y el derecho clásico están en pleno proceso de transformación hacia un derecho computable, en el que los contratos y procesos jurídicos se digitalizan, automatizan y conectan con tecnologías como la inteligencia artificial, blockchain e internet de las cosas”.
Un ejemplo claro, señaló, es la firma de contratos digitales, ya común en plataformas como Amazon, donde cada acción y acuerdo se ejecuta de forma automática y sin intermediarios tradicionales. Para Eduardo Abad “la seguridad jurídica y la confianza digital son esenciales en este proceso,” indicando que existen herramientas que garantiza la validez jurídica de documentos y fotografías mediante sellos electrónicos cualificados que invierten la carga de la prueba en procesos judiciales.
Abad además alentó a los profesionales del derecho a superar el miedo al cambio, experimentar con nuevas tecnologías y formarse para poder liderar la digitalización desde dentro del sector jurídico, subrayando la importancia de que los abogados no dejen que los tecnólogos manejen solos los procesos digitales y que se involucren en el diseño de soluciones que integran el conocimiento legal y tecnológico.
Para concluir, propuso un cambio cultural profundo que impulse la adopción de herramientas digitales para liberar tiempo y enfocarse en el valor humano que solo un abogado puede aportar. Abad visualizó un futuro “dónde la tecnología sirva para potenciar la ley y el derecho, no para sustituirlos, y donde se logre un diálogo efectivo entre ambos mundos para beneficio de todos”.
Reconocimiento a los forofos

Por primera vez, el Legal Management Forum reconoció a cinco entusiastas del propio foro, profesionales que con su implicación y confianza han ayudado a hacerlo crecer y mantenerse como referente en innovación legal. Lidia Zommer, socia directora de Mirada 360º y miembro de Inkietos, presentó a los profesionales homenajeados, que, según destacó, aglutinan, “muchas historias y una misma energía: la del entusiasmo compartido que da vida a esta comunidad. ¡Que el entusiasmo siempre nos acompañe!”
Los reconocimientos de este año fueron para Ana Tortosa, business development, marketing & communications manager en Freshfields; Carmen Castillo, experta en comunicación y desarrollo de negocio; Maite Cuerda, experta en desarrollo de negocio; José María Fernández Comas, director de Derecho Práctico; y José Miguel Abat, director de comunicación y RRII en Ontier.