Quedan cuatro meses para el lanzamiento oficial del nuevo móvil en España y nadie quiere asumir la responsabilidad de anunciar si la tecnología estará o no disponible. El Ministerio de Ciencia y Tecnología, dirigido por Anna Birulés, ha enviado una carta a los operadores para que se retraten y éstos han remitido a su vez una misiva a los suministradores pidiendo que contesten "por escrito" si van a ser capaces de tener la tecnología para entonces. Los implicados, sin embargo, exigen que sea el Gobierno el que tome la responsabilidad, ya que en juego están avales por 740.000 millones.
El Consejo de Ministros autorizó ayer a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) a vender la empresa de armamento Santa Bárbara a la estadounidense General Dynamics por 831,9 millones de pesetas (cinco millones de euros). Con este paso se podrá materializar la operación, un año después de que fuese aprobada por la SEPI.
El rechazo de EE UU al Protocolo de Kioto para la reducción de gases contaminantes ha despertado la conciencia internacional. La UE, Japón, Australia y otros países tratan de acelerar ahora los trámites para la ratificación del acuerdo, que el G-8 se había comprometido a aprobar el año próximo.
El índice de desempleo en Francia cayó por debajo del listón del 9%, a un 8,8%, el mes pasado, su nivel más bajo desde septiembre de 1990, informó ayer el Gobierno.
Una directiva europea armonizará las normas sobre garantías financieras de pago para asegurar los cobros de deuda transfronterizos y extender a pequeñas y medianas empresas las posibilidades de financiación internacional. La armonización permitirá la negociación de los activos de garantía en toda la UE, reduciendo el riesgo crediticio y aumentando la liquidez disponible.
La empresa eléctrica italiana Enel obtuvo en el año 2000 unos beneficios netos de 2.100 millones de euros (350.000 millones de pesetas), frente a los 2.250 del año anterior, según datos hechos públicos ayer al finalizar la reunión de su consejo de administración.
Telecom Italia ganó un 17% más el año pasado, gracias a los menores impuestos, que permitieron compensar la caída en el crecimiento de la facturación del antiguo monopolio italiano de telefonía. Otra gran ayuda procedió de las ventas de activos realizadas en 2000, que sumaron 4.400 millones de euros (732.098 millones de pesetas).