La gestora de planes de pensiones de CC OO y UGT busca un hueco en los nuevos convenios sectoriales
Los sindicatos controlan el 40% de Gestión de Previsión y Pensiones y el resto del capital lo tiene BBVA
Los sindicatos Comisiones Obreras (CC OO) y UGT mantienen una participación del 40% en la gestora de planes de pensiones Gestión de Previsión y Pensiones (GPP), que administra activos por valor de 6.500 millones de euros, y maneja el mayor plan de empleo de España, el de la Administración General del Estado (566 millones y casi medio millón de partícipes). Ahora, con la expansión de los planes de pensiones en el ámbito de la negociación colectiva sectorial, la firma aspira a ampliar su negocio, mientras la competencia teme que haya un trato de favor en las adjudicaciones.
Cada uno de los dos sindicatos mantiene un 20% en el capital social de GPP, mientras que el restante 60% está en manos de BBVA, que al tener mayoría consolida sus cuentas en las del grupo. El origen de esta participación se remonta a Caja Postal, una entidad financiera que operó hasta 1991 y que acabó integrada en Argentaria (entidad fundadora de BBVA). “A finales de los 80 era más habitual que los sindicatos tuvieran este tipo de participaciones en el sector privado”, explica un líder sindical de CC OO.
La gestora participada por UGT y CC OO, en 2022 generó unas comisiones de 12,2 millones de euros, que cristalizaron en un beneficio de seis millones de euros, de acuerdo con las últimas cuentas publicadas en el Registro Mercantil. La entidad es la encargada de administrar 67 fondos de pensiones. Además del de la Administración General del Estado, también gestiona el de Radio Televisión Española, el del Canal de Isabel II, Puertos del Estado, la Diputación Provincial de Sevilla, Unilever, Mahou, Heineken, EDP...
La última reforma de la normativa sobre ahorro para la jubilación creó la figura de los planes de pensiones simplificados. El objetivo es que se extiendan las pensiones privadas a los trabajadores de pymes, y a los autónomos, dos colectivos que siempre han estado al margen de esta figura. El primer paso llegó en julio del año pasado, cuando el sector de la construcción se comprometió a ir metiendo dinero para que el millón de empleados del ramo tenga un colchón extra de cara a su jubilación. Ahora, otras industrias negocian seguir este camino. “Lo que nos tememos es que en esos convenios colectivos se dé prioridad a la gestora de los sindicatos”, explica el director general de otra firma.
Desde los sindicatos descartan que vaya a haber ningún tipo de trato de favor. “GPP es una gestora que lleva años compitiendo en pie de igualdad con el resto de entidades del sector”, apuntan en Comisiones Obreras. “Lo que sí que puede hacer valer es su sesgo hacia la inversión socialmente responsable, donde lleva años siendo una gestora pionera”.
Fonditel y los sindicatos
La gestora de planes de pensiones Fonditel se creó para administrar el ahorro para la jubilación de los empledos de Telefónica. Al igual que ocurre con GPP, los sindicatos también están en su accionariado. En concreto, UGT tiene un 15% y Comisiones Obreras otro 15%. El resto está en manos de Telefónica.
La firma administra un patromonio de más de 4.000 millones de euros en planes de pensiones y otros 300 millones de euros en fondos de inversión. La mayor parte del negocio proviene del dinero de empleados y exempleados de Telefónica y sus filiales, aunque también cuenta con productos abiertos a todos los públicos. También gestionan planes de empleo para otras empresas y el año pasado desarrollaron su primer plan de pensiones simplificado, pensado para autónomos.
Fonditel intentó también convertirse en una de las cinco gestoras escogidas para administrar los nuevos planes de pensiones de promoción pública, pero su propuesta fue descartada al presentarse fuera de plazo.
GPP, al estar controlada en un 60% por BBVA, tiene su sede en la ciudad corporativa del banco, en el barrio madrileño de Las Tablas. Desde hace cuatro años, la sociedad gestora mantiene un acuerdo de prestación de servicios con BBVA Asset Management, por el que la gestora se hace cargo de administrar las carteras de fondos de pensiones de GPP, la gestión de riesgos, auditoría interna, relación con partícipes... La firma gasta 2,8 millones de euros en concepto de “otros servicios” y tiene 1,1 millones de euros en gastos de personal, según las cuentas de 2022, las últimas disponibles.
El máximo responsable de una de las cinco mayores gestoras de planes de pensiones en España también muestra sus dudas hacia la situación de GPP. “El hecho de que los sindicatos estén en el accionariado puede condicionar a las comisiones de control que tienen que elegir gestora. Creo firmemente que en otros países esto sería un caso de incompatibilidad en la contratación”.
En los planes de pensiones de empleo convencionales, en los que está especializado GPP, hay una comisión de control en la que están representados la plantilla y la empresa que lo ha promovido. A menudo contratan a asesores para que les ayuden a definir la política de inversión o a elegir la mejor gestora. Uno de los responsables de una de estas consultoras explica que “GPP lleva años operando en dura competencia con el resto de gestoras, sin que los sindicatos hayan tenido influencia para que consiga nuevos mandatos”.
La reforma promovida por el exministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, para impulsar el ahorro colectivo para la jubilación, además de crear los planes de pensiones simplificados, también creó los planes de pensiones de promoción pública. Cinco gestoras se hicieron con el mandato para desarrollar este producto. Una de ellas fue GPP.
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