Sacyr Agua gana la primera concesión chilena de una desaladora
El proyecto lleva aparejada una inversión de 275 millones
El Gobierno chileno va a confiar a Sacyr Agua la primera concesión de una desaladora en el país. La filial del grupo Sacyr ha sido seleccionada para el diseño, financiación, construcción y la operación de una planta en la región norteña de Coquimbo, cuya ejecución llevará aparejada una inversión de 318 millones de dólares (273 millones de euros).
La instalación, con tecnología de ósmosis inversa, tendrá una capacidad de tratamiento de 800 litros de agua por segundo y prestará servicio a un área de influencia con 540.000 habitantes en las comunas de La Serena, Coquimbo y Ovalle.
El contrato, licitado en diciembre del año pasado, ha sido promovido por la Dirección General de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (MOP) en busca de garantizar el abastecimiento de agua en una de las zonas más afectadas por la sequía en Chile. Además de la desaladora, Sacyr tendrá que instalar una red de impulsión de agua desalada de unos 60 kilómetros de longitud, estaciones de bombeo y un estanque de regulación de 8.000 metros cúbicos a unos 20 kilómetros de la planta.
Medio centenar de compañías se habían interesado por el proceso, entre ellas las españolas Acciona Agua, Dragados, FCC Aqualia, Aldesa, Azvi, Lantania y San José, además de compañías locales, gigantes del agua como Veolia, y grandes grupos chinos.
La presencia de Sacyr en Chile se remonta a 1996, operando distintas concesiones de infraestructuras, en el sector de la construcción y con servicios de gestión del ciclo del agua. En su cesta de activos chilenos figuran cinco aeropuertos, 11 autopistas, siete hospitales en distintas fases de desarrollo y plantas de depuración. El pasado 28 de octubre la compañía anunció la adjudicación de una autopista de 330 millones en el país andino. Sacyr Agua, por su parte, cuenta con varios contratos de ciclo integral del agua en el país.
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