Las aerolíneas elevan su oferta de verano en España pese a la inestabilidad política y económica
La Asociación de Líneas Aéreas anuncia 246 millones de asientos para la nueva temporada, un 6% por encima de lo operado entre abril y final de octubre de 2024
Programar rutas y capacidad para la temporada aérea de verano, que comienza ahora y llega hasta finales de octubre, no ha sido tarea fácil para las aerolíneas ante el fuerte ruido político, los conflictos bélicos que se mantienen abiertos o los signos de contracción de importantes economías como la alemana o la de Estados Unidos. Pese a ello, el sector sigue con buenas expectativas en España y la Asociación de Líneas Áreas (ALA) ha avanzado esta mañana la programación de 246 millones de asientos, lo que supone un incremento del 6% sobre lo que realmente se voló en la temporada de verano de 2024.
Esta mayor oferta en el periodo más caliente del año se encuentra en sintonía con la estimación de tráfico por parte del operador aeroportuario Aena, que espera 320 millones de viajeros en las terminales durante todo el ejercicio, un 3,4% sobre la histórica cifra del cierre de 2024, de 309,3 millones de pasajeros.
El presidente del colectivo de aerolíneas, Javier Gándara, se ha referido ante los medios de comunicación a los factores económico y geopolítico como importantes condicionantes, al tiempo que ha llamado a la acción al Gobierno de Pedro Sánchez para solucionar cuanto antes los impagos a las compañías por los vuelos subvencionados a residentes de Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla para conectar con la península o entre islas. Gándara ha llamado a cubrir una deuda que la asociación estima en 425 millones (a 15 de marzo) correspondiente aún a 2024, y que se agravará a lo largo de este ejercicio, de Presupuestos Generales del Estado prorrogados, al no contar Aviación Civil con dotación suficiente (560 millones presupuestados en las cuentas de 2023). Después de que los pagos del 75% de subvención de cada billete fueran congelados en marzo de 2024, Aviación Civil retomó en febrero las liquidaciones y la deuda baja de de unos 800 millones contabilizados a finales de enero.
Se teme que el agujero llegue a los 1.250 millones a final de diciembre, y el riesgo en el que insisten las compañías reside en la pérdida de conectividad en los territorios extrapeninsulares, donde operan aerolíneas como Binter, Iberia, Ryanair, Air Europa y Vueling. Desde ALA se ha criticado esta mañana en rueda de prensa que el Gobierno haya minimizado el problema alegando que se trata de un problema administrativo y puntual. “El Ejecutivo tiene que actuar de inmediato porque este problema se está acrecentando. Hoy por hoy no tenemos ninguna certeza por parte del Gobierno de una solución que acabe con la asfixia financiera que está soportando algunas de estas compañías aéreas por estos impagos que ponen en riesgo algunas de las rutas que unen Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla o el mantenimiento de sus frecuencias”, ha aseverado Javier Gándara.
La oferta de capacidad en las rutas entre Canarias y la península alcanzó los 61,81 millones de asientos en 2024, lo que supone un 9,6% más que en 2023 y un 18% por encima del registro de 2019. En el caso de las conexiones entre Baleares y la península, en 2024 se ofertaron 55 millones de asientos, un 6% más que en 2023 y un 12,85% sobre la cifra de 2019.
Canarias como gran palanca de crecimiento
De darse una fuerte ejecución de la programación ya anunciada, los aeropuertos de la red de Aena volverían a fijar un nuevo récord de tráfico este verano. Solo en Canarias el aumento de capacidad ha sido del 11%, doblando el incremento medio en el resto del país. El sector tiene presupuestado un total de 1,4 millones de operaciones, lo que arroja un alza del 0,6%.
Este 2025 ha comenzado de forma óptima en lo que toca a la demanda. Los 39,8 millones de viajeros acumulados entre enero y febrero suponen ya un 5% de crecimiento en comparación con los mismos meses del año pasado. Pero el presidente Gándara ha mostrado cautela sobre la evolución en los próximos meses. “Llevamos dos años consecutivos de crecimiento en los que se ha batido récord. Este año hemos empezado con cifras superiores a las de 2024 y esperamos un verano con más tráfico del de hace un año, por lo que, si ningún factor externo cambia esta tendencia, podríamos acabar 2025 con un nuevo récord”. Desde su punto de vista, la demanda “constata las ganas de viajar de la gente y de recuperar los años perdidos por la crisis sanitaria”.
Otro nubarrón que se cierne en el horizonte de las aerolíneas es el de una posible congestión en el control aéreo, con las consiguientes demoras en los vuelos. En ALA creen que el verano será complicado tras la recuperación de los tráficos previos a la pandemia. “El verano pasado los retrasos en ruta por congestión de tráfico aéreo en Europa aumentaron más del 50%, es imperativo que esta situación no se repita este verano”, ha reclamado Gándara.
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