El Sabadell recibe un amplio apoyo de la junta, aunque flaquea en la política de retribuciones y los cambios estatutarios
El banco catalán obtiene un apoyo de más del 90% en la mayor parte de los asuntos y exhibe fortaleza frente al BBVA
El Banco Sabadell recibió un amplio respaldo de sus accionistas en la junta de este jueves. La mayor parte de los puntos a tratar fueron aprobados con un apoyo superior al 90% de los asistentes a la junta, si bien dos asuntos concitaron menos apoyo. Se trata del informe de remuneraciones del consejo y los cambios propuestos en los estatutos sociales del banco, si bien estos temas también salieron adelante.
Estos dos asuntos eran los más polémicos de esta junta de accionistas. De hecho, el asesor de voto ISS aconsejaba a los fondos votar en contra. Por un lado, en el informe de remuneraciones que recoge un alza en el sueldo del consejero delegado, César González-Bueno, del 84%, hasta los 3,3 millones de euros. De cara a 2025, el banco contempla un salario fijo de dos millones de euros para González-Bueno, que se completará con aportaciones de 301.000 euros a planes de pensiones y un millón de euros en bonus a corto plazo y otro tanto por el cumplimiento de objetivos a largo (con un máximo de 1,4 millones en cada concepto). La votación de este tema, que es de carácter consultivo, se ha saldado con un apoyo del 81% con un 18% en contra.
Por el otro lado, la entidad también proponía modificar los estatutos sociales para impedir que alguno de sus consejeros trabaje también en otra entidad financiera. Esto se produce después de que una consejera del banco, Laura González-Molero, abandonase la entidad para ser la nueva presidenta de DKV en España. Este asunto ha tenido un 72% de votos a favor, un 27% en contra y el 0,2% de abstenciones.
El asesor de voto consideraba que los argumentos esgrimidos para justificar estos aumentos en las retribuciones no están justificados. Afea que la firma no explica cómo se vincula el salario fijo con el grupo de competidores analizados, ni especifica cómo se determina el incremento en los emolumentos. “El salario fijo del consejero delegado antes del incremento no parece poco atractivo. Observamos que los componentes del sueldo del consejero delegado se incrementan en un 25% cada uno, en comparación con la política de retribuciones aprobada en 2023″, afirma el informe. También apunta a que puede mejorarse la información sobre el pago de los bonus de ejercicios pasados y a que no se informa del nivel de logro de los objetivos de ejercicios pasados para cobrar el bonus. Con respecto a los cambios en los estatutos, asegura que esto necesita un análisis caso a caso y que puede impedir la atracción de talento al consejo.
Con respecto al resto de asuntos, el Sabadell ha recibido un contundente apoyo de sus accionistas. También en los más vinculados a la renovación como consejero del CEO, César González-Bueno. Este asunto recibió el apoyo del 99,3% de los asistentes. Niveles similares, superiores al 99%, recibieron de apoyo las principales armas que ha sacado la entidad para complicar la opa del BBVA. Se trata del pago de un dividendo complementario, de 12 céntimos por acción, así como la activación de dos programas de recompra de acciones, por 247 y 750 millones.
El banco exhibe un fuerte apoyo de sus accionistas de cara a la opa del BBVA, en una junta que contó con una asistencia récord, del 70% del capital. La oferta está condicionada a que más del 50% del capital acepte la oferta —a razón de una acción del BBVA y 0,29 euros de dividendo por cada 5,019 títulos del Sabadell— y ninguno de los puntos del orden del día la adhesión ha caído a niveles siquiera cercanos.
También el BBVA, en una junta celebrara el viernes, mostró un contundente cierre de filas. En ninguna de las votaciones ha flaqueado por debajo del 95%. En el informe de remuneraciones del consejo el apoyo fue del 95,6%, frente al 81% del Sabadell. Especialmente clave en esta cita era el punto cuarto, el que autorizaba al consejo para ejecutar la opa; la aprobación ha sido del 97,6%, por encima del 96% que lo apoyaron en la junta extraordinaria de julio del año pasado, con un quorum superior al de entonces.
La junta del Sabadell ha servido para testar con qué apoyo cuenta el consejo de administración para afrontar esta batalla contra el BBVA. No obstante, aún tienen tiempo para pronunciarse. La operación aún debe obtener el visto bueno de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y después el Gobierno podrá ampliar o limitar las condiciones que imponga. Finalmente, será la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la última en dar luz verde a la transacción, para que después se inicie un plazo de aceptación de entre 15 y 70 días, a elección del BBVA. Será este el momento en el que los accionistas del banco catalán tengan que tomar una decisión sobre si canjear o no sus títulos.
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