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Así se desbloqueó la CNMC: las presiones de Cuerpo aceleraron la renovación del regulador

Desbloqueada la situación del Banco de España y la CNMV, el ministro Carlos Cuerpo logró ‘in extremis’ un acuerdo con Junts para cubrir las vacantes del organismo regulador y de Competencia

Carmen Monforte
CNMC
Sede de La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en Madrid.PABLO MONGE

El pasado 23 de diciembre, en el último Consejo de Ministros del año, el Gobierno aprobaba, no sin cierta sorpresa, la propuesta de renovación de las cinco vacantes de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que se venían prolongando desde el verano de 2023. La demora en cubrir estos puestos (tres de ellos totalmente vacíos y dos, con consejeros en funciones: Xabier Ormaetxea y Bernardo Lorenzo) se atribuía a la falta de acuerdo con el Partido Popular para repartirse este y otros organismos. Sin embargo, según fuentes conocedoras del proceso, en el caso de la CNMC, el problema radicaba en la posibilidad de que Junts junto con el PP impugnase el reparto en la Comisión de Asuntos Económicos del Congreso que debe votar los nombramientos.

Porque, así como en otros casos, como el de la CNMV (donde no es posible el veto), en el de la CNMC el resultado de la votación puede ser impugnado a posteriori por la mayoría. Y sin el apoyo de Junts, los nacionalistas catalanes junto con el PP y Vox, habrían sumado 18 votos en dicha comisión parlamentaria, frente a los 17 de la izquierda. Dadas las pésimas relaciones con los populares, que además pedían tres de los cinco nuevos puestos de la CNMC, la única opción del Gobierno era llevarse a Junts a su terreno, cuyas relaciones tampoco atraviesan por su mejor momento, y negociar la entrada de un consejero propuesto por el partido catalán. De esta manera, la votación se invertiría de 18 a 17, con el aislamiento del PP que, por otro lado, tampoco quiso negociar la renovación del gobernador y subgobernadora del Banco de España y los máximos responsables de la CNMV, con Carlos San Basilio (al que el PP y Vox dieron su voto a favor) como presidente y Paloma Marín, como vicepresidencia (en este caso, los dos partidos de derechas votaron en contra).

Finalmente, según las mismas fuentes, han sido las largas presiones del ministro de Economía, Carlos Cuerpo, a cuyo departamento está adscrita la CNMC, las que han acelerado el ya demorado nombramiento de los cinco consejeros del organismo que preside Cani Fernández. Con un sentido “más institucional” y dado que la CNMV se renovó “dentro de plazo”, Cuerpo habría ganado la partida al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, más cauto y preocupado por los equilibrios parlamentarios, aseguran fuentes políticas. En el caso del Banco de España y la CNMV no ha habido tradición de reparto de sus consejos, pero sí en el de la CNMC, con 10 sillones, incluido el de la presidencia. En todos los casos, el PP se ha negado a participar.

Quizá la urgencia de Economía en cubrir las vacantes de la CNMC, cuyo quorum para tomar decisiones estaba en el límite (los 10 consejeros se reparten entre la Sala de Regulación y la de Competencia), ha llevado a una renovación “un tanto deslucida”, en opinión de las mismas fuentes. Según la propuesta que el ministro de Economía llevó al Consejo de Ministros en vísperas de Nochebuena, se remitió al Congreso de los Diputados la designación de Ángel García Castillejo, como vicepresidente del organismo; María Vidales, por el PSOE a propuesta del ministerio que dirige Cuerpo; Enrique Monasterio, por el PNV; Pere Soler; y Rafael Iturriaga, como segundo representante del PSOE. Los candidatos deberán comparecer ante la Comisión de Economía del Congreso en el plazo de un mes desde su aprobación por el Consejo de Ministros.

De entre los nuevos consejeros de la CNMC, cuyo mandato será de seis años sin posibilidad de reelección, ninguno ha sido propuesto por el Ministerio para la Transición Ecológica, que dirige desde noviembre Sara Aagesen, tras el nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta para la Transición Verde de la Unión Europea. Ello se atribuye a la decisión de Aagesen de reservar sus propuestas para la futura Comisión Nacional de la Energía (CNE), organismo de salida cuya recuperación se está tramitando a través de un proyecto de ley en el Parlamento, y que contará con un consejo de siete miembros. Mientras se segregan las funciones de regulación y supervisión del sector energético, que pasarán a la CNE, estas siguen en manos de la CNMC.

En este sentido, hay quien asegura que el PNV, más interesado por la energía que por cualquier otro sector, ha preferido poner a su representante, sin que se descarte la posibilidad de que una vez constituida la nueva CNE, Monasterio sea trasvasado. De hecho, Enrique Monasterio, ingeniero industrial procedente del Ente Vasco de la Energía (EVE), donde ocupa el cargo de director de Desarrollo, tiene un perfil energético, si bien, no regulatorio. En el caso de Junts, ha vuelto a optar, como en la época como CiU, por un perfil político: aunque Pere Soler ha estado en la Autoridad Catalana de la Competencia, ello se ha limitado a unos cuantos meses y el perfil de este abogado es claramente político y muy ligado al procés.

La sombra de Óscar López

El nombramiento de mayor peso es el de Ángel García Castillejo, como vicepresidente, a propuesta del ministro de Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López. Con el nombramiento de este abogado, el Gobierno pretende potenciar la imagen audiovisual y de telecomunicaciones de la CNMC (el sector más relevante que quedará tras la escisión de Energía) y resarcirle de su designación frustrada como presidente del Consejo Audiovisual que no se llegó a crear. García Castillejo formó parte del consejo de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) hasta 2013, organismo en el que había desempeñado también cargos directivos, y, aunque sus orígenes políticos están en Izquierda Unida, se le atribuye un acercamiento paulatino hacia el PSOE. La CMT fue uno de los reguladores sectoriales que el PP eliminó para integrarlo en la CNMC.

La vicepresidencia de la CNMC estaba vacante desde el fallecimiento de Ángel Torres en agosto de 2023. Según fuentes del sector, el perfil del nuevo vicepresidente parece alejado del de la presienta, Cani Fernández, muy cercana a la exministra de Economía Nadia Calviño, a la que le debe el puesto, añaden las mismas fuentes. No obstante, Fernández ha conseguido que la cuota que correspondía al Ministerio de Economía recaiga en una persona de su confianza: María Vidales, quien hacía pocos meses había sido nombrada directora de Promoción de la Competencia.

Aunque los nuevos consejeros no tienen asignada de antemano a qué sala irán, todo apunta a que Vidales, Iturriaga y Soler irán a la de Competencia, en tanto García Castillejo (le corresponde como vicepresidente) y Monasterio pasarán a la de Supervisión Regulatoria.




Sobre la firma

Carmen Monforte
Es redactora de Energía de Cinco Días, donde ocupó también los cargos de jefa de Especiales y Empresas. Previamente, trabajó como redactora de temas económicos en la delegación de El Periódico de Cataluña en Madrid, el Grupo Nuevo Lunes y la revista Mercado.
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