El Gobierno remite al Congreso el proyecto de ley de restablecimiento de la CNE
La norma, que devuelve la independencia al regulador energético, se tramitará por vía de urgencia
El Consejo de Ministros ha aprobado hoy remitir al Congreso el Proyecto de Ley para el Restablecimiento de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), que se tramitará por vía de urgencia. La nueva CNE recupera su independencia después de que fuese integrada en 2013, junto a otros reguladores sectoriales, a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). El organismo, ahora en la Sala de Supervisión Regulatoria de esta, mantendrá las funciones de inspección y regulación, así como la de las liquidaciones de los sistemas eléctrico y y del gas.
Así lo ha anunciado hoy la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en su comparecencia tras el Consejo de Ministros, que también ha aprobado la actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para su remisión a Bruselas. Se trata de los dos asuntos más importantes del ámbito de Teresa Ribera que le quedaban por aprobar antes de su designación oficial como vicepresidenta de Competencia y Transición Verde de la Unión Europea. Según sus palabras, con este proyecto de ley se recupera la CNE como autoridad regulatoria independiente. Ribera ha recordado que el cambio de paradigma que supone abandonar los combustibles fósiles y cumplir con los compromisos internacionales de descarbonización de la economía, la recuperación de un órgano especializado en el ámbito energético es “capital”.
La vicepresidenta ha detallado que se recupera la estructura y las funciones de la CNE, cuyo consejo será nombrado mediante real decreto por el Gobierno, a propuesta del titular de Transición Ecológica, “entre personas de reconocido prestigio y competencia profesional en el ámbito de actuación de la Comisión, con una experiencia mínima de cinco años en materias relacionadas con los sectores objeto de supervisión”, tal y como recoge el anteproyecto de ley. El mandato tanto del presidente de la CNE como de los consejeros será de seis años, sin posibilidad de reelección. Una vez recibido el dictamen favorable del Consejo de Estado sobre la futura norma, se avanza en la recuperación del este organismo regulador, “con esta nueva visión de impulsar la descarbonización y fortalecer el diálogo entre los responsables energéticos, algo que venimos impulsando desde 2018″.
La segregación de la CNE formó parte del acuerdo que el PSOE y Sumar sellaron hace un año para la formación de Gobierno. El texto ha superado las distintas fases del trámite para su aprobación: consulta pública, un informe de la CNMC, que pidió mayor independencia financiera y el del Consejo de Estado.
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