¿Cuál es el rol del BCE en la ofensiva de UniCredit sobre Commerzbank?
El regulador bancario ha evitado dar precisiones sobre sus próximos pasos, aunque su análisis estará centrado en cuestiones de solvencia
Mientras las acusaciones vuelan entre Berlín y Roma, el silencio es el rey en Fráncfort. UniCredit se ha convertido en primer accionista de Commerzbank, y ha logrado superar la participación del Estado alemán, aunque tiene en el horizonte un obstáculo más difícil de superar que las críticas entre los socios europeos: el visto bueno del Banco Central Europeo. De momento, el regulador bancario ha evitado dar precisiones. ”Las fusiones transfronterizas han sido esperadas por muchas autoridades, y será muy interesante ver cómo se desarrolla ese proceso en las próximas semanas”, comentó la presidenta del BCE, Christine Lagarde, el pasado 12 de septiembre, después de que el gigante italiano desvelara su participación, que se limitaba en ese entonces al 9%
“De lo que estamos hablando aquí es más bien de una fusión transfronteriza entre dos grandes instituciones nacionales, y eso es algo que, como he dicho, será revisado desde el punto de vista normativo”, ha precisado Lagarde. En su respuesta, la presidenta de la entidad ha evitado resaltar que el BCE quien tiene la palabra final sobre la operación. Para que UniCredit aumente su participación en Commerzbank por encima del 10%, necesitará la aprobación del supervisor europeo, quien está a cargo de monitorear a los bancos más grandes de la zona euro. Es decir, La liquidación física de los instrumentos financieros adquiridos por UniCredit, y revelados este lunes, solo podrá producirse una vez obtenidas las autorizaciones necesarias.
Para comenzar este proceso, UniCredit deberá hacer algo que, de momento, no ha hecho: explicar sus planes para la entidad alemana. La entidad italiana adelantó que ha pedido autorización a los reguladores locales y comunitarios para seguir aumentando su presencia hasta el 29,9%, aunque sin precisar más detalles. El banco con sede en Milán solo ha insistido en que hay un “valor sustancial que se puede desbloquear en Commerzbank”, ya sea de forma independiente o dentro de UniCredit, “en beneficio de Alemania y de las partes interesadas del banco en general”.
La preocupación central del BCE será si la operación es viable para UniCredit, un banco con abundante capital y una rentabilidad sólida. Tiene una ratio de capital de nivel 1 (CET1) del 16.2%, muy por encima de su objetivo del 12.5%-13.0%, incluso a pesar de su generoso programa de dividendos y recompra de acciones. Esto es similar a lo que hizo el regulador bancario en el caso de la opa del BBVA sobre el Banco Sabadell, en el que manifestó su “no oposición” a la transacción, centrado únicamente en cuestiones de solvencia y sin considerar cuestiones como la competencia o la concentración bancaria. Es decir, los técnicos en Fráncfort no tendrán en cuenta los dos principales temores del Ejecutivo alemán: posibles despidos y una caída en el crédito para pequeñas y medianas empresas, un segmento en el que Commerzbank mantiene un fuerte músculo.
De momento, el responsable de política monetaria del BCE, Joachim Nagel, ha mantenido una postura bastante neutral. “Necesitamos bancos fuertes y robustos para que las empresas puedan abordar y financiar sus tareas futuras”, ha comentado esta semana. De proceder con una fusión, la nueva entidad tendría una capitalización de mercado superior a los 78.000 millones de euros, lo que le convertiría en el tercer mayor banco de Europa, según estimaciones de Bloomberg Intelligence.
Por lo pronto, el proceso de aprobación del regulador bancario no augura una respuesta rápida. El BCE tiene 60 días, prorrogables por 30 días adicionales, para emitir su decisión. Cualquier paso deberá tener el visto bueno del Consejo de Supervisión, donde están representados todos los miembros de la eurozona.
Si la propuesta fuera denegada o si UniCredit considera que la decisión adoptada le perjudica, podrá solicitar un nuevo análisis al Comité Administrativo de Revisión del BCE. Si el resultado de dicho procedimiento no fuera satisfactorio, la entidad también puede presentar un recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.