Sandra Ortega pierde 43 millones con su inmobiliaria tras devaluar su cartera de propiedades
Ferrado Inmuebles apunta al impacto de los tipos de cambio para reducir la tasación de sus activos en EE UU y Reino Unido
El negocio inmobiliario de Sandra Ortega, la hija mayor del empresario Amancio Ortega y la mujer más rica de España, sufrió un importante revés en 2023. Ferrado Inmuebles, la compañía con la que invierte en esta actividad, entró en números rojos y registró una pérdida neta de 43,3 millones de euros, tras haber conseguido unos beneficios de 11,5 millones en el año anterior.
El de 2023 es el primer resultado negativo de Ferrado Inmuebles desde 2020 y es el segundo más abultado de su trayectoria, tras los más de 128 millones que perdió en el año del inicio de la pandemia de Covid-19. Como se extrae de las cuentas anuales que ha depositado recientemente en el Registro Mercantil, la firma inmobiliaria de Ortega registró en su cuenta de resultados unos deterioros de 52,4 millones de euros, claves para llegar a la pérdida con la que cerró el ejercicio.
Aunque no detalla el origen de los mismos, Ferrado Inmuebles sí describe que, durante el pasado año, primero las subidas de tipos de interés en economías como la europea, la estadounidense y la británica en 2022 y 2023, y segundo la evolución negativa del tipo de cambio del dólar frente al euro, provocaron “descensos en los valores de tasación de los inmuebles de la compañía y de sus filiales directas”. Una situación que considera “coyuntural y cíclica”, y que no repercute en los flujos de caja de la sociedad, ya que Ferrado Inmuebles no prevé vender los inmuebles devaluados.
Los deterioros afectan, sobre todo, a sus filiales en EE UU y Reino Unido, donde el valor de la cartera está “influenciado por la evolución del tipo de cambio del dólar y de la libra esterlina frente al euro”, indica su informe de gestión. La filial Grupo Ferrado Properties, radicada en EE UU, sufrió una pérdida neta de 13 millones de euros en 2023, y Eldon Street, ubicada en Reino Unido, las elevó por encima de los 15 millones.
Este tipo de empresas inmobiliarias apuntan la pérdida de valor de sus edificios, en este caso como deterioro, lo que afecta a su resultado anual, aunque no implique una salida de efectivo de caja sino un efecto contable. Ferrado no indica el valor a precio de mercado de sus propiedades. La sociedad registra estos activos a coste de adquisición, aplicando deterioros si el valor recuperable de los mismos fuera inferior a su importe en libros, como recuerda el auditor Deloitte en las cuentas de esta compañía. El valor neto contable de ese portfolio es de 211 millones.
La compañía explica en el documento que sus inversiones se encuentran en España, Francia, Alemania, Portugal, Austria y una parte significativa en EE UU y Reino Unido, lo que hace que el valor de esa cartera está influenciada por el tipo de cambio de dólar y libra frente al euro.
En el informe también se destaca la compra de un edificio de oficinas en Alemania el pasado año, aunque no da más detalles sobre su precio exacto o ubicación. Sí se destaca que en el apartado de inversiones en oficinas, la diferencia entre 2022 y 2023 es de más de 52 millones, lo que ofrece una cifra aproximada de la transacción. Igualmente, se señala que la matriz realizó una aportación de 59,7 millones a la filial Eldon Street para comprar y realizar obras.
De las inversiones en inmuebles, valoradas en 239,5 millones en libros, el 77,6% corresponde a edificios de oficinas en manos de Sandra Ortega y el resto corresponden a hoteles, locales comerciales y naves industriales.
La sociedad, igualmente, ha aportado 41 millones a Grupo Ferrado Properties para rebajar deuda y a la también filial Ferrado Nacomporta por 26,6 millones, una sociedad con la que construye un resort de lujo en la ciudad costera lusa de Comporta.
Ferrado es, a su vez, la filial inmobiliaria del holding Rosp Corunna, administrado por Ortega desde la muerte de su madre Rosalía Mera en 2013. Con esta compañía, la inversora gallega ganó 178,8 millones (un 15% menos en un año) fundamentalmente por el dividendo de Inditex, según el informe de resultados consolidados de 2023. Rosp Corunna, tal como publicó este diario a inicios de agosto, ha recibido determinadas reclamaciones judiciales y no judiciales por parte de algunas entidades financieras en las que solicitan que el grupo se haga cargo de deudas financieras, que pertenecen a Room Mate, por los 150 millones, aproximadamente. Algo que desde la compañía de la hija del fundador de Inditex niegan.
Esta inversora es la mujer más rica de España con una fortuna de 10.800 millones de dólares (9.700 millones de euros, a cambio actual), según calcula Forbes.
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