Dia pierde 94 millones hasta junio por el agujero de la venta de su filial brasileña
Sin el impacto negativo de casi 107 millones, la compañía de supermercados habría cerrado el semestre en beneficios
Dia cerró el primer semestre del ejercicio con una pérdida neta de 93,5 millones de euros, un resultado negativo un 39% superior al del mismo periodo del año anterior. Unos números rojos que se explican por el impacto contable negativo que ha tenido en sus cuentas la venta de su filial brasileña, culminada en mayo pasado a un precio simbólico de 100 euros y que, como informó la propia Dia, traía consigo una pérdida de 101 millones de euros.
Esa cifra, según las cuentas semestrales que ha depositado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se eleva finalmente a 106,8 millones de euros, de los que 88,5 corresponden a las pérdidas que acumuló la filial brasileña en 2024 hasta su desvinculación del grupo. Otros 18,3 se atribuyen al resultado del propio traspaso del negocio, que ha sido adquirido por MAM Asset Management, un fondo de gestión activa de la entidad financiera brasileña Banco Master.
En total, Dia se apunta en su cuenta de resultados un impacto negativo de 109 millones por los negocios traspasados, que arrastran el resultado del semestre a la mencionada pérdida de 93,5 millones. Durante el periodo, la compañía de supermercados también completó las ventas de Clarel al grupo colombiano Trinity, y del negocio portugués a Auchan.
Sin estos impactos, Dia, que ya solo opera en España y Argentina, habría cerrado el semestre con un beneficio neto de 16 millones de euros. Durante el mismo, la compañía alcanzó unas ventas netas totales, incluidos los negocios discontinuados, de 3.306 millones, un 8,2% inferior a las del primer semestre de 2023. Contando solo España y Argentina, los ingresos netos crecen un 6,3% hasta 2.816 millones, con un crecimiento superior al 5% en el mercado doméstico, donde alcanza un beneficio neto de 25,1 millones.
En Argentina, pese al “difícil contexto macroeconómico”, con una importante caída del consumo derivada de los recortes económicos implantados por su gobierno, la pérdida neta es de 9,6 millones, aunque Dia destaca el haber logrado un resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado de 14 millones “que le permite autofinanciarse”. Allí, las ventas alcanzaron los 767 millones, un 9% más.
Tras la conclusión del primer semestre, Dia da por finalizado el proceso de transformación iniciado hace cuatro años, así como la simplificación de su operativa, “creando dos plataformas de crecimiento y rentabilidad como son los negocios en España y Argentina”, según dice su consejero delegado, Martín Tolcachir, en un comunicado. “Dia es hoy un negocio sólido y rentable. Este escenario nos permite poner nuestra energía y recursos en España y Argentina, donde nuestra propuesta de valor omnicanal, única en proximidad, tiene la aprobación de los clientes y vemos un claro potencial para seguir creciendo y mejorando los resultados”, añade.
A 30 de junio, la deuda financiera neta se situaba en 426 millones, un 66% inferior a la que tenía hace tres años. Como explicó el propio Tolcachir en la última junta de accionistas, Dia abordará en la última fase del año la refinanciación del grueso de su pasivo, el correspondiente al crédito sindicado firmado en 2018 y refundido en 2021 tras la recapitalización del grupo.
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