El IDAE abre un ‘casting’ para invertir 100 millones en empresas verdes
El ente público destina hasta 2026 más del doble de lo dedicado en cuatro décadas a entrar en el capital de proyectos innovadores
Casting inversor abierto, con 100 millones de euros en menos de tres años. El Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE) ha desvelado este lunes su nueva estrategia inversora hasta 2026, con la que regará decenas de proyectos innovadores encaminados a acelerar la transición energética en España. El monto anunciado supone más que duplicar las inversiones acometidas por este ente público —adscrito a la Secretaría de Estado de Energía— en las cuatro últimas décadas.
Los citados 100 millones de euros irán a parar a proyectos de movilidad sostenible, eficiencia energética, renovables, infraestructuras y almacenamiento de energía, así como a reforzar la cadena de valor industrial de las energías verdes, a economía circular o a hidrógeno renovable, según han detallado los directivos del Instituto en la presentación de su estrategia de inversiones para el periodo 2024-2026. Recuerdan, además, que los fondos europeos de recuperación —de donde procede parte del dinero— “contemplan la inversión pública directa como un mecanismo para avanzar en ámbitos estratégicos de la transición energética”.
“Con estas inversiones queremos apoyar iniciativas que pueden escalar este proceso de cambio y, también, reforzar la competitividad del sector”, ha afirmado la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, en un acto celebrado en la sede del Colegio de Ingenieros Industriales, en Madrid. “Hay muchas iniciativas que necesitan un respaldo y esta nueva estrategia de inversiones permitirá al Instituto tener una presencia minoritaria, testimonial, pero importante en el capital de proyectos audaces”. Con un objetivo: “Apoyar una cartera equilibrada de tecnologías, empresas y startups con el objetivo de que puedan escalar de una manera clara y viable”.
En la misma línea, el director general del IDAE, Joan Groizard, ha enfatizado en la voluntad del ente de invertir en “donde añadamos valor, sin hacer un efecto de crowding out [expulsión de inversiones privadas por la entrada de capital público]”. “Buscamos agentes colaboradores y estar donde aportemos valor, donde haya innovación tecnológica y nuevos modelos de negocio para avanzar en la transición energética. Tenemos 100 millones de euros para que el IDAE se convierta en accionista de nuevos vectores y nuevas soluciones energéticas”, ha agregado.
El IDAE se autoimpone un límite máximo de 10 millones en el capital de cada empresa invertida, con un mínimo del 5% y un máximo del 20% del capital. Estas compañías no podrán haber recibido ninguna ayuda de este organismo en los dos últimos años ni tener ninguna solicitud cursada en ese sentido.
“No son ayudas de Estado, sino inversiones que se realizan en condiciones de mercado. Lo que buscamos son colaboradores que nos ofrezcan proyectos”, ha subrayado Miguel Rodrigo, director de Conocimiento, Desarrollo de Nuevos Modelos de Negocio y Competitividad del IDAE. “Lo que queremos es que se nos perciba como un socio sólido y confiable”, ha añadido al tiempo que deslizaba dos atributos clave de toda iniciativa que aspire a ser invertida por el Instituto: ser técnicamente viable y económicamente rentable.
Hay más. Las firmas a las que irán destinados los 100 millones de euros tendrán que contribuir a alguna de las siguientes externalidades positivas que busca incentivar el IDAE: la aportación a los objetivos del Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC, que fija los objetivos de renovables y ahorro de energía), que sean innovadores, que tengan un impacto favorable en el medio ambiente y que tengan un efecto multiplicador sobre otros proyectos. Los criterios de valoración serán, sobre todo, cinco: que sean económicamente viables, que sean replicables y escalables, que tengan potencial de mercado y que refuercen la cadena de valor industrial.
Según las cifras de la jefa de Inversiones del IDAE, Consuelo Lozano, este organismo ya ha recibido 80 propuestas de empresas interesadas en la entrada de capital público a su accionariado o al de alguno de sus proyectos. En las cuatro últimas décadas —desde 1986—, el organismo lleva invertidos 40 millones de euros en casi medio centenar de proyectos y hoy sigue presente en el capital de medio centenar de ellos.
Entre las iniciativas financiadas hasta la fecha se encuentran algunas de las primeras instalaciones eólicas y fotovoltaicas —las que necesitaban la muleta de las primas, no como las actuales, que van directamente a mercado—, así como las cogeneraciones industriales, que surten de energía tanto a la industria como al sistema eléctrico. En los últimos años, en cambio, ha estado mucho más centrado en hidrógeno verde y en digitalización; todo un signo del cambio de los tiempos en el sector energético español.
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