Hereu pide una ley de descarbonización de la industria “de país” y “no de Gobierno”
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha denunciado los impuestos a los que se somete al sector industrial y a la banca y pide “más seguridad jurídica y estabilidad regulatoria”
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha sido tajante: “Necesitamos una ley de industria que capte todos los retos que necesita España y Europa, que sea de país y no de Gobierno”. El titular socialista del Ejecutivo ha reclamado una mayor colaboración de la ciudadanía y del sector empresarial porque “si no hay inversión solo nos queda la retórica”. En la jornada de Retos y oportunidades de la descarbonización en la industrial, organizado este miércoles por Naturgy, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha denunciado, por su parte, los impuestos a los que se somete al sector y a la banca y pide “más seguridad jurídica y estabilidad regulatoria”.
“Esto es un trabajo conjunto en el que sumando esfuerzos podemos sacar adelante una eficaz transición energética. Nosotros solo podemos defender el modelo social y político si reforzamos la base industrial de la economía”, ha señalado Hereu en su intervención.
En cambio, el presidente de la patronal, con un tono más crítico, ha señalado que “tiene poco sentido que estemos haciendo esfuerzos en materia de descarbonización si desde Europa no se hace”. Además, el dirigente de la CEOE ha añadido que “el continente no se puede despistar con las materias primas y se está despistando”. A pesar de ello, Garamendi ha reivindicado que “es un tema que nos afecta a todos y en el que tenemos que colaborar tanto el sector público como el privado”.
Mientras tanto, el ministro Hereu ha anunciado la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la convocatoria del mecanismo de compensación por los costes de las emisiones indirectas de gases de efecto invernadero, con un presupuesto de 300 millones de euros, en lo que supone la mayor dotación de la historia para esta materia.
Estas ayudas al CO2 vienen a complementar todo un paquete de apoyo energético a la gran industria, como la compensación de los cargos de la factura eléctrica destinados a la financiación de la retribución específica a renovables y cogeneración de alta eficiencia y por la financiación adicional en los territorios no peninsulares. El importe ejecutado en los últimos años ha sido de 125 millones de euros.
Por otro lado, el presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, ha admitido durante su intervención que “para descarbonizar hay que cambiar la forma de hacer las cosas, pero es algo que requiere su tiempo”. Además, ha criticado cómo se está abordando la electrificación en España: “Es algo importante, pero no todos los procesos son electrificables”. Ha aprovechado para pedir al Gobierno un mayor apoyo en materia económica y “un marco normativo que sea eficaz en el sector industrial”. Respecto a la descarbonización, ha apuntado que “no es posible llevarla a cabo, sino se mejora la competitividad”.
Mientras tanto, la situación de la industria en España es delicada. Su peso en el PIB es del 15,3%, por debajo de la media europea, 17,8%. El catedrático emérito de la Universidad de Barcelona, Mariano Marzo, culpa de esta situación a la penalización fiscal y la falta de apoyo a industrias clave para la economía. “Uno de los grandes problemas para la industria y su competitividad es que la política energética de la UE está sumida bajo la transición ecológica. “Hemos estado muy centrados en el medioambiente y hemos perdido el poco en la seguridad energética y en la economía. Hay que tener en cuenta que la política energética es mucho más que descarbonizar”, ha señalado.
Este experto ha puesto de ejemplo a Estados Unidos por la forma en la que está gestionando la industria en su proceso de reindustrialización: “lo está haciendo de una manera sencilla, se está llevando a cabo un proceso de reindustrialización, existe una neutralidad energética, hay inversión privada y se percibe dentro de un clima estable”.
“No todo está perdido. Tenemos que perder grasa y ganar músculo. Europa está empezando a poner el foco en la competitividad, pero debemos tener una autonomía estratégica en juevas materias primas y cadenas de suministros
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