Meliá dispara su beneficio en el primer trimestre y se fija como objetivo ganar este año 525 millones de euros
La primera hotelera se compromete ante sus accionistas a reducir su deuda neta desde 5,3 a 2,5 veces sobre el resultado bruto de explotación (ebitda)
Meliá está dispuesta a pisar el acelerador del crecimiento y al mismo tiempo trabajar sobre una de sus grandes asignaturas pendientes, como es el excesivo endeudamiento (cerró 2023 con un pasivo neto de 2.613 millones de euros, lo que equivalió a 5,3 veces el ebitda (resultado bruto de explotación).
En un hecho relevante remitido esta mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), apenas quince minutos antes del arranque de la Junta General de Accionistas, la compañía avanzaba las previsiones de negocio que iba a transmitir Gabriel Escarrer, presidente y consejero delegado de la hotelera, para este año. “Informará sobre el objetivo de obtener un ebitda no inferior a 525 millones de euros y reducir el ratio de deuda neta por debajo de 2,5 veces ebitda”, recalcó la compañía. En su intervención posterior, el presidente y consejero delegado anticipó un incremento de doble dígito en el ingreso medio por habitación y una mejora de las últimas previsiones, realizadas al cierre de 2023. “Nos podemos comprometer con ustedes a superar de nuevo el objetivo de consenso de mercado en cuanto al ebitda del Grupo, concluyendo 2024 con un resultado de explotación excluyendo plusvalías de al menos 525 millones, siempre que se mantenga la tendencia actual del mercado”, señaló ante los accionistas.
Este resultado de explotación representaría un crecimiento de al menos un 7% respecto a los 489,8 millones alcanzados en 2023. El ajuste de la deuda neta también sería inédito. Un recorte que ya ha cumplido su primer hito con la venta de una participación mayoritaria en una joint venture con tres hoteles al Banco Santander por 300 millones a través de una ampliación de capital anunciada a mediados del pasado mes de abril. “La compañía mantiene como una de sus prioridades continuar fortaleciendo su balance mediante la generación de caja y la rotación de activos”, señaló Escarrer cuando se cerró la desinversión.
En materia de expansión, la compañía ha confirmado su objetivo de firmar 30 contratos nuevos a lo largo de este año, con lo que añadiría 7.000 habitaciones a su cartera hotelera. A 31 de diciembre de 2023, Meliá contaba con 350 activos operativos en todo el mundo de los que 139 estaban en España y otros 98 en la zona que agrupa a Europa, África y Oriente Medio. Y preveía la firma de 23 contratos este año, de 18 en 2025 y de 17 en 2026, con lo que mejora y acelera sus previsiones de crecimiento para este ejercicio. “Desde el mes de enero a la fecha hemos firmado ya 19 hoteles con más de 2.900 habitaciones, incluyendo dos excelentes hoteles en Pattaya (Tailandia) y cuatro nuevas adiciones al portfolio exquisito y singular de nuestra marca The Meliá Collection en Asia, España y Malta”, precisó el consejero delegado durante la Junta.
Subida salarial para los consejeros y recuperación del dividendo
Entre los puntos del orden del día que fueron sometidos a votación, los accionistas aprobaron una subida salarial generalizada para los miembros del Consejo de Administración, cuyos salarios habían permanecido congelados desde la pandemia. En el punto tres de las propuestas de acuerdo que se han votado, la compañía presentó para su aprobación la nueva política de remuneraciones del Consejo, que incluía una subida del 18% para el consejero delegado y un incremento medio del 12% para el resto de consejeros. Fue aprobada con una amplísima mayoría del 98,6% de los votos a favor.
Los propietarios de la compañía también se verán recompensados por la mejora de la cuenta de resultados, aunque el importe es simbólico. En el punto 1.6 se proponía la distribución de un dividendo de 0,0935 euros brutos por acción hasta un importe máximo de 20,6 millones, que se haría efectivo el 9 de julio de 2024. La retribución al accionista estaba suspendida desde 2019. “Hoy podemos anunciarles el retorno al reparto de dividendos. Concretamente, se repartirán 20 millones de euros, con un pay-out (porcentaje de beneficio que se destina a retribuir al accionista) del 17,5%, y con una rentabilidad por dividendo que se sitúa por encima de la media de empresas hoteleras a nivel internacional”, recalcó Escarrer. El 99,6% de los accionistas votaron a favor.
Arranque esperanzador en 2024
A última hora de la tarde, la hotelera balear remitió a la CNMV los resultados financieros correspondientes al primer trimestre del año, que mostraron crecimientos acelerados en todos los indicadores de negocio. La facturación se disparó un 11% hasta los 437,4 millones de euros, el resultado de explotación mejoró un 22,3 hasta los 95,3 millones, mientras que el beneficio neto rozó los 7,5 millones de euros frente a las pérdidas de 0,5 millones de euros acumuladas en el primer trimestre de 2023 o los 59,5 millones del mismo período de 2022.
Y las previsiones para el segundo y el tercer trimestre transcurren por la misma senda de optimismo. “Tras una positiva Semana Santa, a pesar de las fechas y de la meteorología desfavorable, el grupo prevé un verano positivo, con incrementos de reservas en libros de doble dígito en los hoteles vacacionales españoles”, recalcaron fuentes de la compañía, quienes destacaron el buen tono de la división de reuniones, incentivos y congresos (MICE, por sus siglas en inglés), con ventas para los próximos trimestres que son a fecha de hoy un 11% superiores a la de 2023 y un 20% respecto a las de 2025.
Por geografías, las mejores perspectivas se esperan para el mercado asiático, “donde la recuperación del mercado chino hacia el sudeste asiático refuerza el crecimiento, con previsiones muy positivas para Tailandia e Indonesia”, seguida por República Dominicana y México. “En España se espera un verano con crecimientos en ocupación y precio, que se suma a la anticipación del inicio de temporada, tanto en archipiélagos como costas peninsulares. Se anticipa un buen segundo trimestre para los hoteles urbanos, tras una exitosa campaña Wonder Week”.
A 31 de marzo de 2024, la deuda neta, lejos de reducirse, aumentó un 17,3% trimestral hasta los 2.630,4 millones de euros. Desde la hotelera lo justificaron porque la venta a Santander se cerró en abril y tendrá impacto en la cuenta de resultados a partir del segundo trimestre, al igual que algunas rotaciones de activos valoradas en 47 millones de euros..
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