Dia reduce las pérdidas un 75%, hasta 30 millones, y contempla salir de Brasil
El negocio en España, que logra beneficios por primera vez en seis años, impulsa al grupo en 2023
El grupo Dia logró reducir sus pérdidas un 75% el año pasado, hasta 30 millones de euros, gracias al fuerte impulso del negocio en España, que volvió a dar beneficios (122 millones) por primera vez en seis años, según los resultados publicados este jueves. La empresa, que da por completado el giro de estrategia iniciado en 2021 para recuperar la rentabilidad, sufrió el año pasado el lastre de Brasil, país del que no descarta salir tras duplicar los números rojos.
La compañía, que también tiene presencia en Argentina y Portugal, entró en pérdidas en 2018 y estuvo a punto de ir a la quiebra. Desde entonces, y tras ampliar capital, los esfuerzos se han dirigido a simplificar la estructura, vender los establecimientos de gran formato, centrarse en el comercio de proximidad y potenciar las marcas propias. En este primer semestre del año tiene previsto completar las operaciones de venta de las perfumerías Clarel, con un millar de tiendas en España, al grupo colombiano Trinity y las 458 tiendas de Minipreço a Auchan en Portugal, lo que supone su salida de este país.
Tanto España como Argentina dieron beneficios el año pasado, pero Brasil amplió las pérdidas: pasó de 41 millones negativos en 2021, a 72 millones en 2022 y unos números rojos récord de 154 millones el año pasado. “El contexto es muy difícil, con mucha competencia, una disminución de los volúmenes de venta y una agresiva actividad promocional que no están en línea con nuestras expectativas”, ha explicado el consejero delegado del grupo, Martín Tolcachir, en una rueda de prensa. “Estamos evaluando diferentes opciones”, ha dicho. La empresa tomará una decisión a lo largo de 2024, incluida la posibilidad de desprenderse de los activos en aquel país.
A nivel global, las ventas conjuntas de España, Argentina, Brasil y Portugal alcanzaron los 6.759 millones, un 3,3% más en términos comparables respecto al año anterior y un 7% menos si se tiene en cuenta el impacto del tipo de cambio en Argentina. Mientras, el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado sumó 216 millones, un 7,8% más que en el año anterior, lo que supone una mejora de 0,4 puntos porcentuales del margen sobre la venta neta, hasta 3,2%, una muestra que la empresa atribuye al “buen desempeño” del negocio y “las eficiencias operacionales” implantadas. El grupo ha cerrado el ejercicio con una red total de 3.956 tiendas.
En el mercado español, donde la empresa es cuarta en cuota tras Mercadona, Carrefour y Lidl, la evolución ha sido notable: pasó de los 177 millones de pérdidas de 2021 a 122 millones de beneficio el año pasado. Mientras, las ventas comparables crecieron un 10,7% y las netas un 10%, hasta 4.855 millones. El Ebitda se situó en 184 millones de euros, un 31% más que en 2022. A cierre de año, el 86% de las 2.318 tiendas operaba ya con el nuevo modelo.
Precios e IVA
El giro de estrategia también se ha pasado en el impulso de las marcas propias, con una nueva imagen y una mejora de la calidad. En el negocio, estas marcas suponen un 55% del total de la cesta de compra de Dia, frente al 48% de 2021. “Creemos que esta tendencia va a continuar”, ha afirmado Ricardo Álvarez, consejero delegado en España. La empresa prevé que los precios se moderen este año en general, tras dos años de aumentos sin precedentes del IPC de los alimentos. El directivo ha añadido que Dia destinará 150 millones extras en promociones este año. “Esperamos que 2024 sea un año con mucha contención de precios”, ha vaticinado.
Sobre la aplicación de la rebaja del IVA en algunos productos, que el Ministerio de Economía está analizado para comprobar que los supermercados la han trasladado a los consumidores, Álvarez ha sido tajante: “En nuestro caso, ejecutamos las bajadas estrictamente en nuestros precios”.
El accionista mayoritario de Dia es LetterOne, un grupo inversor con sede en Luxemburgo, y que ha provocado una situación anómala en la cadena de alimentación. Su principal accionista, el empresario ruso Mikhail Fridman, abandonó el consejo de administración de LetterOne en marzo de 2022, tras aparecer en la lista de oligarcas a los que se aplican las sanciones impuestas por Bruselas como respuesta a la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Todos sus activos se encuentran congelados por la UE, con lo que no se pueden vender, y el empresario sigue alejado de la gestión. Preguntado al respecto, Tocachir ha afirmado que no hay ninguna novedad sobre esta situación.
La compañía avanzó el año pasado en la reducción de la deuda financiera, en 120 millones hasta 422 millones, y también logró una disminución de su peso en relación al Ebitda, gracias a la mejora de este último.
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